El italiano Alessandro Riguccini (31-0, 27 KO) se proclamó campeón mundial interino de la Asociación Mundial de Boxeo (WBA) en el peso superligero (140 lbs) tras vencer por nocaut técnico en el segundo asalto al venezolano Jesús Correa (18-1, 16 KO), en el combate principal de la velada, celebrada en el Anfiteatro del Lago de Tirana, Albania.
Desde el primer campanazo, Riguccini impuso su ritmo con desplazamientos agresivos y combinaciones al cuerpo. Correa intentó responder con su habitual explosividad, pero fue sorprendido por la precisión del italiano, quien conectó una derecha recta seguida de un gancho al rostro que dejó al venezolano sin capacidad de reacción. El árbitro detuvo el combate en el segundo asalto, decretando el nocaut técnico.
Con esta victoria, Riguccini mantiene su invicto y suma su vigésimo séptimo nocaut, consolidándose como uno de los pegadores más efectivos de la división. El título interino lo posiciona en una categoría que ha visto movimientos recientes.
Correa, de 28 años, sufrió su primera derrota profesional. Aunque mostró determinación en los primeros segundos, no logró imponer su ritmo ante la experiencia y contundencia de Riguccini. Su equipo reconoció el nivel del rival y aseguró que volverán más fuertes.
«Fue un rival realmente duro», dijo Riguccini. «Sobre todo al principio, me atacó con fuerza y me conectó algunos golpes». «Quería ganar este cinturón y lo conseguí. Después me tomaré unos días para reflexionar», aseguró el italiano.
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