Herrera, de 25 años, sumó 20 participaciones, 12 titularidades y dos goles en 965 minutos la temporada pasada. Míchel Sánchez le definió como un jugador «diferencial» en más de una ocasión, pero su participación se vio condicionada por las lesiones.
El jugador venezolano acumula 121 partidos en LaLiga, ya que antes de su paso por Montilivi jugó cedido por el Manchester City en el Huesca, el Granada y el Espanyol. Con el Granada marcó cinco goles en 12 encuentros de la Liga Europa.
Herrera, internacional con la selección de su país, ha seguido los pasos del portero argentino Paulo Gazzaniga, que fichó en propiedad por el Girona tras una temporada en calidad de cedido en la ciudad: en su caso desde el Fulham.
La continuidad de Gazzaniga, Herrera y también de Borja García, renovado el martes tras acabar contrato el día 30 de junio, se suma a los fichajes de Daley Blind, que ha llegado libre, y Sávio Moreira de Oliveira, cedido por el ESTAC Troyes.
«Estoy súper contento de unirme de una manera más seria al Girona»
En una entrevista difundida por la propia entidad, argumentó que se siente «más parte del proyecto» por ser jugador del Girona en propiedad.
Herrera, de 25 años, destacó que quiere aportar su «granito de arena» para que el Girona pueda «seguir creciendo» y llegar a cotas más altas.
«La mentalidad debe ser igualar o mejorar lo hecho el año pasado», añadió el futbolista tras subrayar que el equipo fue décimo en LaLiga la pasada temporada.
También afirmó que se siente «como en casa» en el club y que el vestuario es «una familia» y tiene «una dinámica de trabajo muy buena desde el día a día».
Herrera, internacional con la selección venezolana, se autodefinió como un centrocampista que «aporta nivel físico y llegada al área».
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