Cuando escucho expresiones de un compañero trabajador, al decir que la única salida que le queda es la muerte. La muerte le puede llegar a través de un tiro producto de la delincuencia, y a lo mejor considere que un tiro podría ser la solución a su problema; también le puede llegar de una manera lenta como lo está haciendo este régimen, a través de la falta de comida, y medicamentos.
El Trabajador, ante la imposibilidad de darle de comer a su familia, carga encima un dolor y una angustia ya irresistible para un ser humano.
El hermano de clase, igualmente expresa, que ya ha renunciado a todo, desde mandar a los hijos al colegio, hasta la de comprar sus medicamentos, para tratar solo comprar algo de comida para su familia, pero ya eso ni siquiera lo puede hacer, con ese miserable salario, que no alcanza ni para comprar 1/2 cartón de huevo, o 1/2 kilo de queso blanco.
Ya comienza, hacerse costumbre acostarse sin cenar, irse al trabajo, sin desayunar, para tratar de que la comida rinda para el resto de la familia, hijos y la mujer. Ya no le alcanza para llevarles a sus padres una bolsita de alimentos para su sustento mínimo.
Y así transcurren los días para los trabajadores en Venezuela, regresar a su casa verles la cara a sus hijos, esperándolo como lo esperaban en el pasado con el pan y la mortadela para la cena. Tener que agachar la cabeza, para no verles el rostro a la familia, y ya ante su desesperación, muchos pensando en el suicidio como única salida.
Muchos compañeros trabajadores han muerto sin que nadie responda o de una simple explicación, porque él régimen que gobierna, no está cumpliendo con la cláusula de HCM y entrega de medicamentos. Muchos ya han muerto, trabajadores en Sidor, Alcasa, Venalum, Ferrominera, activos, incapacitados y ni hablar de los jubilados, eso lo dejaremos para la próxima y semana.
Pero lo más grave, es la enfermedad espiritual y mental, por la depresión que genera vivir bajo este régimen de criminales, sin que tengas a nadie que de la cara por este pueblo.
Quizás, a muchos este artículo les parezca duro, pero es la triste realidad de muchos padres de familia, quienes no tienen para llevar el sustento a su hogar. Aunque a muchos trabajadores, les parecía un sueño, la llegada de Chavez y su revolución, hoy se les convirtió en una horrenda pesadilla.
Hoy, les digo a mis hermanos trabajadores, la solución nunca será la muerte, como alternativa. Podemos estar cansados exhaustos, pero debemos recordar a Simón Bolívar, en su delirio sobre el Chimborazo, y asumir que ante morir, debemos luchar hasta vencer.
No te des por vencido, unamos nuestra fuerza trabajadora y convirtamos nuestra clase trabajadora en la vanguardia que necesita el país, para su libertad.
Los invito a repensar sobre esta propuesta de Unión y firmar parte de esa vanguardia que requiere nuestra herida #Venezuela. Debemos rescatarla para dejar una herencia limpia de maldad, debemos reconstruirla para nuestros hijos y nietos
Víctor Moreno Presidente CTV Bolívar ( Fetrabolívar)
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