Carrera Manzanares, adyacente al Paseo Caroní, frente a Panka, Puerto Ordaz. Foto: Níger Martínez

Carreras Guaripe, Guere, Suata, Guanipa, Manzanares, Querecure y calles laterales de la zona industrial Unare, Puerto Ordaz, se hallan destruidas y con botes de aguas blancas en distintos sitios, el vital líquido llega hasta el Paseo Caroní.

En la carrera Manzanares, frente a Panka prevalece un manantial que surge del tubo matriz.

Las aguas blancas en el recorrido que realizan han ido abriendo huecos en la calle y luego se acumulan en la avenida en cuestión.

El tráfico automotriz en los casi 7 kilómetros de carretera es permanente, aunado a que los charcos que se hacen en algunos tramos, pueden generar accidentes de tránsito; también deterioro de la vía.

Detrás del edificio en el cual quedaba 180º Of Bar, hay una fuga de agua que ha creado grandes huecos en la carretera, aparentemente es de vieja data por lo profundo de los agujeros que tiene esta importante arteria vial.

Son más de 20 botes de aguas blancas que se pueden contar en el perímetro de la zona industrial Unare, sin embargo, el problema no es tomado en cuenta por representantes de la Hidrológica del estado Bolívar.

Todas las calle de la zona industrial Unare, se hallan destruidas, el bote de agua es permanente, el mismo sale del edificio en el cual quedaba 180º of Bar

Abandono y desidia

Comerciantes que aún siguen en las diferentes calles laterales del Paseo Caroní se quejaron por el deterioro de todas las calles de esta zona.

“Al gobernador del estado Bolívar y alcalde de Caroní Tito Oviedo, solo les importa mostrar una parte de la ciudad; mientras que la otra no les interesa”, apuntó Wilmer Gómez.

Solicitaron asfaltado para calles de este sector que se encuentran deterioradas.

Reclamaron al ayuntamiento y solicitaron que los recursos por conceptos de impuestos pagados a la municipalidad sean devueltos en asfaltado a la ciudad.

El recién asfaltado Paseo Caroní, comenzó a deteriorarse por los botes de aguas

Soluciones temporales

Aquiles, tiene 11 años como guardia de seguridad en uno de los edificios de la carrera Manzanares, en donde está un tubo principal fracturado, el guardia de seguridad admitió que trabajadores de Hidrobolívar han hecho lo posible por solucionar la fuga de agua.

“El arreglo es temporal, a los pocos días continúa el bote de aguas. Es como poner un pañito caliente, sobre una herida, que puede aliviar momentáneamente el dolor, pero no cura la causa”, indicó

Además, durante estos 11 años que se estableció  en este sitio, ha podido sobrevivir vendiendo abonos para las matas, igual, vendiendo plantas como palmas, chaguaramas, dátiles, entre otras ornamentales.

Aquiles, lleva once años en esta zona, y es testigo como las calles de este sector se han ido rompiendo

 

 

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