Caracas. Ronald Acuña Jr. no esperó mucho tiempo para reencontrarse con su forma. El jardinero y bateador derecho sacudió un jonrón de 473 pies como abridor en el orden el primer partido de la doble tanda disputada entre Bravos y Yanquis de Nueva York, después de estar fuera de acción desde el 10 de agosto debido a una inflamación en la muñeca izquierda.

El batazo fue en cuenta de 3-2, ante una recta de cuatro costuras, a 93,7 millas por hora, del estelar derecho de los neoyorquinos, Gerritt Cole.

Fue el cuadrangular más largo en la incipiente carrera de Acuña y el de mayor distancia en la historia del Truist Park. La conexión puso adelante 1-0 a Atlanta, que eventualmente ganaría el desafío 5-1, e incluso pasaría la escoba en la doble jornada del miércoles.

Cole, que cargó con la derrota, no sólo había llegado al partido con marca de 4-0 y 2.75 de efectividad, sino que trataba de extender una impresionante racha de 20 victorias consecutivas iniciada el 27 de mayo de 2019, lapso en el que exhibía un promedio de 1.97 carreras limpias.

Según Statcast, el estacazo de Acuña tuvo una velocidad de salida de 114.0 mph y un ángulo de despegue de 31 grados, lo que le hizo aterrizar más allá de la mitad de las gradas del left field.

Fue el decimosexto vuelacerca del patrullero abriendo un juego como primer bate, segundo en la historia de la franquicia, sólo superado por Felipe Alou, que largó 17 en esas circunstancias.

Los 473 pies de la parábola que recorrió el jonrón del venezolano es la segunda mayor distancia de la campaña, detrás de los 483 pies de una conexión de Giancarlo Stanton. Antes del miércoles, el estacazo más largo de Acuña era de 466 pies, con una velocidad de salida de 115.9 mph, contra los D-backs de Arizona, el 10 de mayo de 2019, para romper un empate en el octavo inning y guiar el triunfo de Atlanta.

Cole otorgó boleto en el tercer tramo al criollo y después Dansby Swanson envió una pelota sobre la pared del jardín derecho para darle ventaja a los locales de 3-0. Marcell Ozuna siguió con un jonrón de 469 pies. 

Antes de lastimarse, Acuña atravesaba por un gran momento ofensivo y en sus primeros 10 encuentros en agosto, exhibía una línea ofensiva de .364/.488/.818, con tres dobles, cuatro jonrones, ocho anotadas, nueve remolcadas y 1.306 de OPS. Ahora, retoma las cosas justo donde las dejó.

 Redacción SNPD con

información de LVBP.com

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