El Ejército de Mali asegura haber matado a 42 presuntos terroristas tras una «emboscada compleja con coche bomba» que sufrieron los militares en la carretera que une las localidades de Menaka y Ansongo, en el este del país, y que dejó cinco soldados heridos.
En un comunicado, las Fuerzas Armadas de Mali afirman que un coche bomba se lanzó este viernes contra una patrulla militar, pero fue destruido a una distancia de seguridad.
«La gran explosión del coche bomba causó cinco heridos entre los militares, dos de ellos graves», dice la nota, que añade que tras «el fracaso de la emboscada, un grupo de una decena de terroristas fue perseguido y destruido en su refugio de repliegue».
Los militares también destruyeron un artefacto explosivo improvisado descubierto a 102 kilómetros de la localidad de Ansongo.
En una redada posterior, los soldados mataron a 32 «terroristas», destruyeron dos de sus vehículos, armamento, municiones y productos para construir bombas, indica la nota.
Este país de la inestable región del Sahel, gobernado por una junta militar golpista desde 2020, es escenario de ataques terroristas continuos perpetrados por el Estado Islámico (EI) y la filial local de Al Qaeda, denominada Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes (GAIM).
En los últimos meses, reacciones imprecisas e indiscriminadas del Ejército maliense, apoyado por los mercenarios rusos de Wagner, han provocado además masacres de civiles denunciadas por instituciones como la ONU.
Según la plataforma ‘Armed Conflict Location And Event Data Project’ (ACLED), que monitoriza la violencia en el mundo, en 2023 murieron 3.364 personas en Mali por ataques de grupos no estatales y otras 2.244 a manos de fuerzas estatales.
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