La Arquidiócesis de Caracas informó la muerte del sacerdote keniano Josiah K’Okal en Tucupita del estado Delta Amacuro, quien su familia denunció que habría desaparecido desde el 1 de enero.
La noticia se conoció a través de un comunicado publicado en las redes sociales de la Arquidiócesis de Caracas. Hasta el momento se desconocen detalles sobre las causas del fallecimiento.
Los hermanos de Fe cristiana del padre Josiah K’Okal reportaron su desaparición luego que no regresara de hacer su recorrido en bicicleta este lunes.
El sacerdote partió a las 9:00 de la mañana desde la casa de la congregación Dani Consolata en el sector Paloma, municipio Tucupita.
Sus allegados informaron a las autoridades que en la residencia dejó los documentos de identidad y su celular.
El presbítero acostumbraba a ejercitarse a la par de recorrer las comunidades que evangeliza.
Según su reporte, habría pasado a las 10 de la mañana por el urbanismo indígena Janokosebe en la entidad para dar su saludo de Año Nuevo, en un tramo de la carretera nacional.
Cerca de las once pasó por la alcabala de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) apostada en el dique, continuando la travesía del lado monaguense y de allí se le perdió la pista.
El padre Josiah K’Okal, originario de Kenia, ha estado sirviendo como misionero en el estado Delta Amacuro de Venezuela durante los últimos años.
K’Okal era conocido por sus esfuerzos por ayudar a la comunidad local, especialmente a los indígenas. También ha desempeñado un papel decisivo en la puesta en marcha de varios proyectos para el bienestar de la comunidad, como escuelas, clínicas sanitarias y sistemas de suministro de agua.
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