EFE Noticias
Buenos Aires, Argentina. El expresidente del Gobierno español Felipe González dijo este domingo que el chavismo se encuentra ante el fin de su ciclo en Venezuela y consideró que en el levantamiento militar del pasado martes «hubo bastante engaño» por parte de las Fuerzas Armadas al jefe del Parlamento e impulsor de la acción, Juan Guaidó.
Venezuela afronta una crisis política y social que se acentuó después de que el pasado 23 de enero el líder del Parlamento, Juan Guaidó, se declaró mandatario interino al invocar unos artículos de la Constitución venezolana y logró el respaldo de buena parte de los países del continente americano y una veintena de naciones europeas.
La oposición venezolana, que no reconoce el nuevo mandato de seis años que juró Nicolás Maduro el pasado 10 de enero, al considerar ilegítimas las elecciones de mayo del año pasado, asegura que el país atraviesa una «emergencia humanitaria compleja» y ha pedido ayuda a la comunidad internacional para atenderla.
El socialista González sostuvo que está al corriente de lo que sucede en Venezuela y que habló con el líder opositor Leopoldo López, quien se encuentra como huésped en la embajada de España en Caracas.
«Sin ser demasiado específico, afirmo que las conversaciones (entre oposición y militares) han existido y hubo bastante engaño», señaló.
El exmandatario insistió en que la inteligencia cubana juega un papel fundamental en todo el proceso.
«Veo a la inteligencia cubana tendiendo trampas. Pero hace dos años estos contactos no existían, por lo tanto algo se está precipitando», recalcó.
El pasado martes, Guaidó encabezó un efímero alzamiento militar junto a unas decenas de militares y el líder de su partido, el dirigente Leopoldo López, quien burló la condena de casi 14 años de prisión que pagaba en su domicilio para sumarse al movimiento.
La tensión continuó con cinco muertes, según datos de la ONU, en el curso de las protestas en Venezuela tras el alzamiento; mientras el presidente Nicolás Maduro llamaba las tropas a estar preparadas a un eventual ataque exterior.
González sentenció que no le resultará aceptable que tras la eventual caída del actual Gobierno haya quien diga que no sabía lo que sucedía en Venezuela, «como sucedió con Stalin o con Hitler».
Para él, «las bayonetas sostienen a Maduro» pero no es necesario que se produzca un golpe de Estado, sino que «alcanza con que los militares de las cuatro fuerzas se pongan de acuerdo para decirle a Maduro ‘hasta aquí hemos llegado'».
Consideró asimismo que a partir de ahí «habría que negociar si se puede (…) la salida de Maduro».
González sostiene que, si eso se produce, debe ir seguido de un período de transición que dure dos meses y sea «inclusivo».
«Y contar con una figura, que no se ve todavía clara, que sea capaz de dar credibilidad respecto al rescate económico de Venezuela», puntualizó.
González aventuró que «Rusia no se la jugará por Venezuela» pero que «Cuba no tiene más remedio» porque para la isla es «un problema de supervivencia».
Sobre Estados Unidos, afirmó que su inteligencia «no opera racionalmente porque es imposible operar racionalmente con un presidente como Trump» y recriminó que en enero, cuando asumió Maduro su nuevo mandato presidencial, el país norteamericano no sabía qué hacer con Venezuela.
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