Ciudad Guayana. Enmarcado en el apoyo a sectores bien vulnerados de la sociedad, La Fundación Zapatos Rotos ha levantado vuelo en lograr matizar, bajo el espectro del orden que el fútbol da, un espacio positivo para los pequeños y nuevos talentos, que del balompié organizado, debe emergen.
“La pusimos así, porque es parte de la idiosincrasia que manejamos. Muchos de los pequeños que están aquí, tiene zapatos rotos. Son jóvenes que por sus propias condiciones, apoyamos para que tengan un mejor presente y un futuro promisor…” revela el colega periodista Carlos Dickson Pérez, al hacer un balance de lo que es hasta ahora, esta fundación de apoyo a niños y jóvenes guayaneses.
Respaldo del Colegio de Abogados
De hecho, este trabajo inicio a principio del año, y en su rápido crecimiento, se encontró con la mano amiga de la delegación de Abogados de Caroní, que de la mano de la gestión que lleva a cabo, el Dr. Raffo Malavé, ha tendido una extraordinaria mano amiga a esta gestión deportiva, bien significativa, por cierto, cabe destacar.
De hecho, las propias instalaciones, que entornes atravesaba por un momento crítico, ha sido levantada poco a poco, y aunque bastan bastante para devolverle el horizonte gremial que en su ocasión alcanzó, hoy permite a esta Fundación Zapatos Rotos, que respira fútbol por los poros, tener su propia sede.
De hecho, cabe destacar, que en algún tiempo pasado, la cancha –entonces de softbol- fue base de crecimiento de la entonces llamada Escuela de Fútbol Sema Velásquez, que levantó el entonces jugador de Mineros de Guayana.
Hoy años después, la Fundación Zapatos Rotos lleva la batuta de una actividad organizada que tiene además del presidente de la Fundación, el referido colega comunicador social, Carlos Dickson Pérez, a el profesor Ricardo Borrero, como vicepresidente y además entrenador principal de esta escuela de fútbol; mientras que además se cimenta en los directores David Adrián –especialista en planificación-, Andrés Camacaro, el joven estudiante de comunicación, Jesús Marriott; Gabriel Dickson y la señora Mayela Rodríguez.
El norte asumido, ya contempla un trabajo en el que se benefician más de 80 pequeños nuevos valores del fútbol, que cohabitan en los sectores aledaños a las instalaciones deportivas del Colegio de Abogados, como el Barrio La Esperancita –detrás justamente del hoy poco cuidado, Colegio de Periodista de Ciudad Guayana-, además de Mini Fincas y Toro Muerto.
Y para no dejar pasar la ocasión de la semana de celebración del Colegio de Abogados, se llevó a cabo un triangular con la participación de equipo del Lala FC, Centro Portugués Venezolano de Ciudad Guayana y los anfitriones que toman por nombre competitivo, Máquina FZR, y a quienes valga acotar les fue bien, en la jornada de este lunes, donde con todo y el “palo de agua” que cayó, no perdieron ninguno de los juegos que llevaron a cabo.
En definitivas, una acción social y deportiva, que bien pudiera recibir más apoyo, ya sea público o privado, para que estos futuros Ronaldos, Messi, o Neymar jr, pueda encontrar en este camino deportivo, un futuro alentador para sus propias vida y sus propia familias.
Dios mediante, que así sea…
Rodrigo Malagón Forero
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