Túnez.- La oposición tunecina pidió hoy el boicot al referendo constitucional del lunes en Túnez en una protesta visiblemente menos concurrida que las convocadas en meses anteriores contra la política del presidente tunecino, Kais Said
Después de rechazar participar en la campaña electoral a favor o en contra del texto, que termina hoy, la oposición política no ha conseguido una gran movilización a dos días de una histórica votación, ante la que la población se está mostrando indiferente.
«Por el pueblo tunecino, un pueblo que rechace toda forma de golpe de Estado y un pueblo que apoye la democracia y la libertad real, no al golpe y la usurpación del poder», expresó un convencido Miled a Efe, uno de los cientos de participantes que pidieron la caída de Said y la defensa de la Constitución de 2014.
La plataforma opositora -integrada por el partido islamista Ennahda, el liberal Corazón de Túnez, la Coalición ultranacionalista Al Karama y Tounes Al Irada- liderada por el histórico izquierdista, Ahmed Néjib Chebbi, estaba detrás de la convocatoria a través del movimiento «Ciudadanos contra el golpe», como denominan el estado de excepción con el que gobierno Said desde hace un año.
Otras formaciones, que también rechazan participar en la campaña como el Partido Destouriano Libre (PDL) -nostálgico del antiguo régimen- organizaba sus propios actos para pedir el boicot con el fin de no legitimar la votación.
El presidente tunecino ha convocado para este lunes un referéndum para votar una nueva constitución, que marca también un año desde que se arrogara plenos poderes para «rectificar», dijo, el proceso revolucionario que comenzó en 2011 con el derrocamiento al dictador Zine el Abidine Ben Ali.
Por su parte, organizaciones de la sociedad civil convocaron ayer, viernes una manifestación de boicot, la primera desde que se convocara el referéndum y también minoritaria, que terminó en una carga policial.
Según testigos, algunos manifestantes intentaron traspasar la valla de seguridad policial y los agentes intervinieron y detuvieron a al menos nueve personas.
El Sindicato Nacional de Periodistas Tunecinos (SNJT) y la sindical UGTT condenaron hoy la «extrema violencia» de la intervención.
EFE
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