Imagen de una transmisión de un partido de fútbol a través de gafas de realidad virtual. EFE/Captura de vídeo VRInsitu

El partido entre Venezuela y Perú, clasificatorio para el Mundial de 2026, comenzará a tener una producción con gafas de realidad virtual. Una fórmula liderada por VR Insitu, empresa tecnológica con sede en Miami, y Zertior, compañía española especializada en asesoramiento de negocio. Aún no para todos los públicos, pero el estadio infinito ya entra en acción. Una nueva vía en la industria donde deporte y entretenimiento se fusionan.

Raúl Respaldiza, CEO de Zertior, descifra en EFE las claves del deporte del futuro. “Esta tecnología es ya una realidad y tiene un futuro apasionante. Es una visión emergente del negocio, sin limitación de aforo”.

En España, según datos de PwC facilitados por Zertior, se proyectan unos ingresos de 87 millones de euros en 2028 a través de la realidad virtual. Para dicho año, el número de gafas que emplearán los usuarios se estima en 722.000 unidades.

Pregunta: Su empresa ha entrado de lleno en la realidad virtual. ¿En qué punto se encuentra esta tecnología y su relación con el deporte?

Respuesta: Tiene un futuro apasionante. Es cierto que tiene mucha relación con la penetración de las gafas en el mercado. Esta realidad virtual o inmersiva requiere de estos dispositivos, que están evolucionado vertiginosamente; como cuando salió el primer teléfono móvil. Esta tecnología está pensada para los clubes y las propiedades que tienen un contenido atractivo, aquí está la clave. Estamos hablando de un contenido premium que arrastra a cientos de miles de personas que quieren verlo, que es cuando tienes el problema del aforo de tu recinto o estadio. Esto introduce una ventana, una experiencia completamente diferente, que hace accesible la experiencia a cualquier aficionado en cualquier lugar del mundo.

P: Un nuevo paradigma a la hora de concebir los eventos deportivos…

R: Es una visión tremenda de negocio, porque no tienes esa limitación física de aforo. La tecnología de realidad virtual está emergiendo con una fuerza brutal. No hay demasiadas empresas que hayan desarrollado una tecnología puntera y de calidad óptima, pero es algo que está pasando. Nosotros nos hemos metido en ese tablero a través de una empresa, VR Insitu, que tiene tecnología puntera en ese ámbito, y estamos trabajando ya con las primeras experiencias y primeros proyectos. Estamos hablando ya de partidos de Venezuela clasificatorios para el Mundial, como el que juegan contra Perú, una velada de MMA en Ciudad de México y otras fuera del mundo del deporte pero que atacan el mundo del entretenimiento. Es una realidad y con un futuro alucinante.

P: El hecho de probar con diferentes eventos en directo ya supone un gran paso, ¿no?

R: Todo lo que estamos haciendo lo hacemos porque queremos que sea un punto de inflexión. Que, por ejemplo, el evento de MMA sirva de impulso para luego hacerlo con mayor músculo.

P: ¿Qué aporta su compañía en este mercado emergente de la realidad virtual?

R: Nosotros conocemos el mercado y el ecosistema del deporte por nuestra presencia en muchos países. Trabajamos en el posicionamiento del producto en la industria y en su comercialización. Estamos muy ilusionados y muy convencidos de que vamos a poner un nuevo negocio sobre la mesa. Obviamente, esto es un tema de derechos. Hay sectores o deportes con mayor complejidad de negociación que otros, pero venimos a aumentar el negocio.

P: Habla de derechos deportivos. Quizá pueda ser un hándicap en el mercado actual.

R: Todo el mundo habla de la ‘Champions’, de la Liga… Eso se va a acabar haciendo, pero hasta entonces hay otros mercados interesantes para aprovechar esta tecnología. En música va a ser más sencillo, pero en fútbol, por ejemplo, hemos hablado con la Federación Mexicana y lo ven perfecto para su selección, porque tienen sus derechos. Como he dicho, es un tema de derechos, pero no venimos a canibalizar y sí a aportar una nueva vía de negocio.

Nosotros tenemos, digamos, un Netflix, pero sin contenidos. A medida de que vayamos añadiendo y generando contenidos a esa plataforma vas a tener más usabilidad para esas gafas. Pongo un paralelismo con los smartphones. La gente se gasta 1.000 euros en un smartphone porque tiene una usabilidad enorme. También es importante apuntar que no hablamos solo de retransmisiones en vivo, que es posible, también se pueden incluir highlights, resúmenes, experiencias a medida…

P: ¿Cuál es la situación en el mercado respecto a la realidad virtual?

R: Te puedo contar que hemos estado recientemente en México por otros proyectos, pero yo me llevo ya siempre las gafas para cualquier reunión. Tuvimos reuniones al máximo nivel en la Liga de fútbol mexicana, en la Federación, promotores, un fondo de inversión…y todos se mostraron tremendamente sorprendidos de la calidad del producto. Por el lado de las propiedades hay un gran interés, todo el mundo quiere más ingresos y es una vía interesante de monetización.

Desde el punto de vista del aficionado, te encuentras distintas tipologías. Es un producto enfocado a nativos digitales. Por ejemplo, el público de la Kings League sería completamente afín a esto.

P: Habla de que supone una nueva vía de negocio para los clubes. ¿Cómo se monetiza esta realidad virtual en el consumo de deporte?

R: Hay muchas vías de monetización. Puede ser un pago por visión, pero para las marcas esto es un mercado apasionante porque puedes personalizar o segmentar geográficamente para que sea diferente según el usuario. Hay una gran posibilidad de activación. También está la parte de comercio electrónico directamente a través de las gafas. Además, un aspecto importante es que hay mucho apetito de fondos de inversión por este tipo de proyectos que unen tecnología y deporte.

P: Además de esta realidad virtual en busca del estadio infinito, que ya nombró Florentino Pérez en la última asamblea del Real Madrid, en los últimos años está surgiendo una necesidad de los clubes por remodelar o construir nuevos estadios. Desde su compañía, como asesores de clubes e inversores en proyectos de estadios, ¿por qué cree que hay este aumento?

R: Es un tema de ingresos. Los clubes y propiedades buscan permanentemente ingresar más. Vuelve a haber un ‘boom’ de los eventos en vivo y la capacidad de facturación de algunos clubes aún está lejos de la que podían tener con unas instalaciones mucho más actualizadas. Eso sí, en los grandes clubes la joya son las inversiones por el día de partido.

P: En España también está de fondo el Mundial 2030. Muchas propiedades aprovechan para actualizar sus estadios e instalaciones. ¿Qué análisis hace de los estadios españoles y de esta situación?

R: Hay un dato bastante elocuente. En Estados Unidos se considera que la vida útil de un estadio es aproximadamente de 25 años. Y si repasamos un poco el parque de estadios que tenemos en España la mayoría de ellos estarían prácticamente obsoletos. Sin duda, el Mundial representa una enorme oportunidad de renovación para muchos de ellos. Y es algo que este país tiene que aprovechar, no simplemente haciendo los deberes por cumplir los estrictos requisitos que manda FIFA sobre lo que debe tener un estadio para albergar un Mundial y sí ir más allá y ver que son edificios, inmuebles, estadios que han de ser sostenibles y un motor de generación de ingresos más allá de los días de partido y de gran impacto social”.

¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!

Facebook X Instagram WhatsApp Telegram Google Play Store