El abogado chileno, Claudio Grossman, quien ejercía como asesor especial de la Corte Penal Internacional (CPI), renuncio a su cargo como una señal de protesta al considerar una «inacción injustificada» por parte del fiscal Karim Kahn contra el Gobierno de Nicolás Maduro por crímenes de lesa humanidad.
En 2021, al letrado le asignaron asesorar la situación de derechos humanos en Venezuela.
Su renuncia la presentó mediante un correo, donde expresó que sus principios éticos le impiden permanecer en una institución, que según Grossman, no actúa con la contundencia que la gravedad del caso exige, citó la agencia de noticias AP.
El pasado mes de septiembre, en un mensaje que envió el jurista, cuestionó la falta de medidas contra los responsables de «violaciones graves de derechos humanos».
«Ya no puedo justificar la elección de no tomar las medidas serias correspondientes contra los autores de las graves violaciones», redactó en un mensaje enviado a Khan.
Por su parte, el chileno advirtió que el ejecutivo de Maduro continúa cometiendo abusos y obstaculiza el trabajo de los organismos internacionales sin enfrentar consecuencias legales.
La renuncia de Claudio Grossman llega, luego que este rechazara una propuesta para renovar su contrato y una llamado del Fiscal del CPI en la que le solicitó reconsiderar su decisión.
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