Este presente con todos en casa desde la distancia social ante un panorama tan dinámico y competitivo como el actual nos ha sacado por completo de nuestra zona de confort, para buscar nuevas estrategias que nos permitan desafiar lo inusual y superar limitaciones.
Se ha desprendido un sin fin de palabras creadoras de realidades como cambios disruptivos, incertidumbre, desaprender, y volver aprender, es así como la constante en los diálogos, las narrativas y los discursos que hoy abundan como un gran despliegue de verbo, es para encontrar sentido, orden y lógica a este nuevo andar.
Este que nos convoca a buscar nuevas estrategias, herramientas para atender las necesidades emergentes y modalidades de trabajo, y que además debemos capacitarnos en tiempo récord bajo presión.
Ante este escenario la importancia de la capacitación profesional y personal es la gran protagonista; en consecuencia de la transformación de nuestras rutinas personales y laborales.
¿Por qué capacitarse en tiempos de cuarentena?
La coyuntura actual sigue dando muestra que la sociedad del conocimiento o la sociedad de hoy relacionada con el aprendizaje están con mucha fuerza ligada a las redes de información. En un contexto cognoscitivo los cambios que hoy experimentamos sostienen formas que no son fáciles y disponibles que además nos invita a empoderar procesos de descifrar, interpretar, asimilar y encontrar nuevas rutas de aplicaciones en cambios disruptivos, crisis, metodologías ágiles, procesos de probar y medir , métricas, e innovación.
Todo esto resaltó por un lado la necesidad de fortalecerse en habilidades blandas, como la gestión de las emociones o inteligencia emocional, liderazgo, inteligencia colaborativa, resiliencia y por otro lado las habilidades técnicas, referidas a destrezas digitales con el propósito de resolver problemas, toma de decisiones y generar flujos de trabajo más eficientes. Lo que trae a la palestra el término aprendibilidad para incorporarse a nuestro lenguaje como la gran oportunidad de aprender y desarrollar nuevas habilidades a fin mantenernos empleables.
Ahora que tenemos tiempo disponible y un abanico grande de posibilidades para la formación con la facilidad que ofrecen los entornos virtuales, la adquisición de conocimientos que podamos aplicar en nuestra cotidianidad desde el hacer requiere de voluntad, compromiso y disciplina traducido a un costo/ beneficio. Es adecuado asegurarse que la oferta de capacitación tenga importantes referentes académicos y expertos en el área
Es tiempo de mostrarnos en nuestra realidad como mejores personas, mejores profesionales, mejores compañeros.
Msc. Carmen García
Máster en Gerencia
Coach Organizacional
Experta en capacitación en habilidades blandas para equipos de trabajo.
coachcarmengarcia.com
@camu.garcia
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