Un colosal visitante celestial está a punto de hacer una aparición cercana al planeta Tierra. La NASA emitió una alerta sobre el asteroide 2024 ON, una roca espacial del tamaño de un estadio de fútbol que se acercará a la Tierra la noche de este miércoles, 18 de septiembre.
A pesar de su tamaño imponente y su velocidad vertiginosa, los científicos aseguran que no hay motivos para alarmarse.
Según explica la NASA, se trata de un asteroide con un diámetro de aproximadamente 290 metros, cuyo tamaño supera a la gran mayoría de los objetos cercanos a la Tierra. Sin embargo, su paso más cercano a la Tierra se producirá a una distancia segura, más del doble de la que la separa de la Luna. A pesar de esta distancia, los astrónomos podrán observarlo utilizando telescopios potentes.
¿Por qué tanto interés?
Los Objetos Cercanos a la Tierra (NEO) como el 2024 ON son de gran interés para los científicos, ya que brindan pistas sobre la formación del Sistema Solar y los riesgos potenciales para el planeta a largo plazo.
Aunque en esta ocasión no existe peligro de colisión, la NASA lo clasifica como «potencialmente peligroso» debido a su tamaño y a su órbita, que lo acerca periódicamente a la Tierra.
La NASA cuenta con una red de telescopios y radares que escanean continuamente el cielo en busca de asteroides y cometas que puedan cruzarse en el camino de nuestro planeta. El Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS) es el encargado de analizar los datos y calcular las órbitas de estos objetos.
Gracias a este trabajo de vigilancia, los científicos pueden predecir con gran precisión cuándo y dónde se producirán los próximos acercamientos.
Más allá del 2024 ON
El asteroide que visitará esta noche a la Tierra no es el único objeto espacial que se acerca al planeta. En las últimas semanas, otros cuatro asteroides de menor tamaño también pasaron cerca. Estos eventos son relativamente comunes, pero cada nuevo acercamiento representa una oportunidad para los científicos de aprender más sobre estos fascinantes cuerpos celestes y afinar sus modelos de predicción.
La NASA y otras agencias espaciales trabajan incansablemente en el desarrollo de tecnologías para desviar asteroides que puedan representar una amenaza real para la Tierra. Aunque hasta el momento no se detectó ningún objeto que represente un peligro inminente, es fundamental estar preparados para cualquier eventualidad.
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