Espera al Señor; Él acudirá. Sé valiente, resuelto y animoso. Sí; espera, y Él te ayudará.
Salmo 27:14 NBV

https://bible.com/es/bible/753/psa.27.14.NBV

El pasaje de hoy forma parte de un salmo de David, quien conocía muy bien a Dios, por lo que confiaba en Él plenamente.

Para David el Señor era su luz y su salvación; era el baluarte de su vida, por tanto, nadie podía amedrentarlo.

David reposaba en Dios, su corazón estaba confiado en las promesas del Señor, porque él lo había visto actuar a su favor muchas veces y sabía que Dios cumple sus promesas.

Muchos años atrás Dios nos hizo un llamado. Hoy seguimos confiando en su Palabra, así como David, nosotros hemos visto en muchas oportunidades actuar al Señor a nuestro favor, nos ha ayudado y sostenido con su diestra de poder.

Él ha guardado nuestras vidas en muchísimas oportunidades, porque tiene un propósito con nosotros, y lo que a Él ha dicho lo cumplirá.

Como hijos de Dios debemos seguir firmes y confiados en las promesas del Redentor, aunque un ejército de aflicciones nos asedie no debe temer nuestro corazón.

Aunque una guerra estalle contra nosotros, nos mantendremos confiados en nuestro Dios, porque Él jamás abandona a los suyos. ¡El Señor mi Dios me sostiene, por eso jamás temeré!

Pr. José N. Corrales
[email protected]
@pastorcorrales

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