Comunidad de Unare I se enfrenta a un problema de contaminación por aguas negras desde hace tres años, afectando drásticamente la calidad de vida de sus habitantes.
Alejandrina Salaverría de Noriega, residente de la zona, declaró a Nueva Prensa Digital su preocupación sobre esta situación que ha sido ignorada por las autoridades competentes.
Según Salaverría, el problema se originó con la presencia de aguas de baja calidad, la cual empeoró significativamente hace aproximadamente un año.
Al parecer, la causa principal podría estar relacionada con la tapa de la tanquilla, generando una situación de contaminación grave y profunda que han descuidado los gobernantes.
«A pesar de múltiples denuncias y solicitudes de ayuda, las autoridades, incluyendo Hidrobolívar y la Alcaldía, no nos han brindado una respuesta efectiva», aseveró.
Efectos nocivos de la contaminación
La falta de acción ha llevado a que la comunidad sufra los efectos nocivos de la contaminación por aguas negras, con olores intolerables que afectan a toda el área y representan un riesgo para la salud pública.
Salaverría también mencionó que la contaminación ha atraído animales no deseados, como zamuros y mosquitos, además de generar un entorno propicio para la proliferación de enfermedades.
Añadió que la limpieza de la zona ha recaído en los residentes, exponiéndose a riesgos innecesarios.
Esta situación no solo impacta a los residentes locales, sino que representa un peligro para los transeúntes, niños, adultos mayores y personas discapacitadas.
40 casa afectadas
Se estima que aproximadamente 40 casas, alrededor de 80 familias, se ven afectadas directamente por esta crisis.
En vista de la gravedad de esta situación, es urgente que las autoridades gubernamentales tomen medidas inmediatas para abordar este problema y proteger la salud y el bienestar de la comunidad de Unare I.
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