El techo de la discoteca Jet Set en Santo Domingo colapsó esta madrugada durante un concierto del legendario merenguero Rubby Pérez, informó Infobae.
El lugar, con capacidad para más de 1.000 personas, se convirtió en una trampa mortal: 44 fallecidos y más de 160 heridos son el saldo preliminar de la tragedia.
Testigos relataron que el derrumbe ocurrió de forma abrupta, sepultando a cientos bajo toneladas de escombros.
La voz que alumbró la oscuridad
Zulinka Pérez, hija del artista, reveló el insólito detalle que salvó a su padre: «Lo encontraron porque se puso a cantar para que lo ubicaran».
Aunque las autoridades no han confirmado oficialmente su estado, el mánager Fernando Soto aseguró a Diario Libre que Pérez está vivo.
El relato de su hija emocionó a la prensa: «Alguien escuchó su voz entre las ruinas y así lo rescataron».
Familia dividida por segundos
Zulinka, quien compartía el escenario con su padre, narró cómo el destino cambió por un intercambio de micrófonos minutos antes del colapso: «Si hubiera usado el suyo, no estaría aquí».
Su esposo la protegió al gritarle: «¡Sal, para que nuestro hijo no quede solo!». La pareja logró escapar, pero confirmó la muerte de un músico y otro en estado grave.
Emergencia nacional
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) reportó 134 traslados a hospitales y más de 200 rescatistas trabajando en la zona.
«No pararemos hasta encontrar a todos», declaró el general Juan Manuel Méndez, director del COE. Mientras, decenas de familiares aguardan noticias fuera de la discoteca, ahora convertida en un símbolo de dolor.
Jet Set: entre la fama y la tragedia
El local, famoso por sus fiestas de los lunes y frecuentado por celebridades, enfrenta ahora cuestionamientos sobre sus medidas de seguridad.
Autoridades prometieron una investigación exhaustiva. Mientras, la historia de Rubby Pérez, cuyo canto lo mantuvo con vida, se viraliza en redes en medio de esta gran tragedia.
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