El aloe vera es una planta con beneficios que incluso le han dado el nombre de “planta mágica”, pues muchas personas se sorprenden de su importante potencial para ayudar en el cuidado del cuerpo, tanto por fuera como por dentro.
Por ejemplo, cuando se trata de la piel, el aloe vera es conocido por su capacidad para ayudar a sanar y protegerla. Mientras que en cuestiones más internas del funcionamiento del cuerpo, el aloe vera se asocia con el cuidado del estómago y la protección del mismo ante irritaciones posibles. Pero estos no son todos los beneficios que tiene esta “planta mágica”. Aquí te contamos algunos otros que harán que quieras integrar desde ya el uso de la naturaleza en tu rutina de cuidado del cuerpo y la piel.
Para reducir efectos de las quemaduras solares
El uso de aloe vera en el cuerpo después de una exposición significativa al sol ayuda a que esta pueda recuperarse. ¿Por qué? Al parecer, la planta tiene propiedades que ayudan a que la piel acelere e intensifique su proceso natural de sanación.
Dado que después de exponerse al sol, cuando la piel queda queda quemadas, es muy importante que las personas dejemos que esta se recupere de manera natural (es decir, que no debemos exfoliarla ni arrancarla), lo recomendable es que aprovechemos aloe vera para fomentar que este proceso suceda de manera adecuada.
También se recomienda que se utilice ropa holgada después de las quemaduras, que evites el agua caliente y que continúes cubriendo esa parte de tu piel, entre otras medidas para reaccionar de manera correcta a las quemaduras en la piel por exposición al sol.
Sanar heridas
El aloe vera tiene propiedades antibacteriales que han sido ampliamente demostradas. Por eso, también puede ser una herramienta ideal para sanar heridas y prevenir que estas se infecten. Si tienes una cortada, por ejemplo, puedes aplicar aloe vera directamente de la planta o en un producto procesado para que esta sane más rápido y para evitar que se infecte. Además, debes saber que el aloe vera es antiinflamatorio, así que no solo te ayudará a sanar heridas, sino que también podrá desinflamarlas si aplica en cada caso.
Reducir bolsas en los ojos
Por las mismas propiedades antiinflamatorias del aloe vera que mencionamos hace un momento, también se suele emplear como ayudante para reducir las bolsas en los ojos. Esa molesta señal de la falta de descanso suficiente que termina por marcar el rostro de las personas. Y aunque también se pueden aprovechar otras opciones para reducir las bolsas en los ojos como dormir mejor, modificar la alimentación, usar hielos y hasta agregar una almohada extra a tu cama, también es cierto que el aplicar aloe vera en forma de gel en las bolsas debajo de los ojos y luego masajearlas durante 5 minutos, o guardar una mascarilla de gel en el congelador durante la noche y usarla por la mañana son parte clave para reducir la inflamación de la parte de debajo de los ojos.
Evitar la caída del cabello
En el área de la salud del cabello, el aloe vera también se ha posicionado como un ayudante fundamental. Para evitar la caída del cabello mediante aloe, lo que se recomienda es que se corte el aloe en trozos, se saque la pulpa y se unte sobre el cabello. Luego de una hora, debe retirarse con abundante agua.
Esto ayudará a que las raíces del cuero cabelludo se fortalezcan. Si este es un problema del que padeces, también te pueden interesar otras recomendaciones para evitar la caída del cabello de manera natural como el consumo de mascarillas de ajo, jengibre y té verde, entre otras opciones.
Cuidar el estómago
Si ya le perdiste el miedo a sacar la pulpa del aloe vera y disfrutar de su consistencia y olor, ¿qué tal pasar al área del sabor? Cuando te duele el estómago, sobre todo como consecuencia de la irritación, ya sea por alimentos picantes o grasos o por consumo de bebidas alcohólicas, comer un poco de la pulpa de esta planta crea una capa protectora en tu estómago que te ayudará a reducir la inflamación y el dolor.
Debes saber que si quieres aprovechar los beneficios del aloe vera, es mejor que emplees plantas que tengan cumplidos entre tres y cinco años, ya que este es el periodo de tiempo aproximado en que desarrollan sus propiedades de manera correcta.
También se recomienda que hayan pasado entre dos a tres días de haber regado la planta por última vez, ya que en estos casos el gel estará más concentrado y sus propiedades serán más directas. Una vez que hayas cortado la hoja y sacado la pulpa, debes saber que el resto de la planta se puede secar rápidamente, por lo que lo ideal es usarla pronto.
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