ONU denuncia abusos contra migrantes en Libia, muchos de ellos enterrados en fosas comunes

El descubrimiento este año de fosas comunes de presuntos migrantes en Libia es síntoma de «extendidas violaciones de derechos humanos contra este colectivo, así como contra refugiados y solicitantes de asilo», denunció este martes el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos Volker Türk.

«La deshumanización de estas personas en situación vulnerable continúa tanto por parte de actores estatales como no estatales», subrayó Türk en su intervención en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas durante un debate sobre el proceso de transición en el país del Magreb tras años de conflicto interno.

Según el alto comisionado austríaco, se siguen cometiendo a gran escala, a menudo con impunidad, la tortura, la extorsión, el trabajo forzado y la hambruna deliberada contra estas personas en situaciones «intolerables» de privación de libertad, así como las expulsiones masivas.

Türk recordó el hallazgo en marzo de una fosa común con 65 cadáveres en el suroeste de Libia, al parecer migrantes fallecidos en la peligrosa ruta por el desierto del Sáhara hacia el Mediterráneo, y denuncias de un hallazgo similar en la frontera entre ese país y Libia.

También subrayó que 1.300 de los 2.400 fallecidos en el Mediterráneo cuando intentaban cruzar hacia Europa entre abril de 2023 y el mismo mes de 2024 procedían de territorio libio.

Detenciones arbitrarias

En su informe, Türk también lamentó los retrasos de la justicia transicional y del proceso de reconciliación en el país, así como una escalada en detenciones arbitrarias, las desapariciones forzadas y otras violaciones de derechos humanos.

Estos abusos han aumentado desde el final de las operaciones en Libia de la Misión de Investigación de la ONU, y se dirigen contra opositores políticos y otras voces disidentes, aseguró el jefe de derechos humanos de Naciones Unidas.

Türk indicó que entre los meses de abril de 2023 y 2024 su oficina ha verificado al menos 60 casos de detención arbitraria de personas que ejercían su libertad de opinión política de forma pacífica, y denunció que en algunos casos estos detenidos fueron asesinados de forma extrajudicial.

Éstas y otras violaciones «están erosionando las libertades de expresión, asociación y reunión, en el contexto de un deterioro del espacio cívico y el estado de derecho».

El proceso político de transición y reconciliación, resumió, «está secuestrado por actores interesados en preservar el status quo, quebrando las esperanzas de los libios por una sociedad más estable, abierta y próspera».

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