Por los botes de aguas negras y blancas algunas calles del centro de San Félix, se han transformado en un verdadero lodazal, vendedores y consumidores se ven obligados a transitar entre aguas negras y blancas que inundan la zona.
Dicho desastre ambiental, resultado de la negligencia municipal, ha convertido el acceso al mercado municipal en un foco de insalubridad.
Los botes de aguas residuales han creado un ambiente nauseabundo, donde los olores putrefactos se mezclan con la basura y desechos de alimentos de los vendedores de verduras, hortalizas, embutidos, pescado, carne, pollos y otros comestibles.
La falta de respuesta por parte de la alcaldía de Caroní, ha permitido que las calles se inunden, sobre todo en tiempos de lluvias, lo que agrava aún más la situación.
El colapso de las tuberías no solo perjudica la vialidad, igual, a comerciantes, vendedores informales y consumidores, cuya problemática representa un grave riesgo para la salud pública.
El caos no se puede esconder en las siguientes calles: Negro Primero, Los Corrales, Girardot, callejón del Mercado de Buhoneros, entre otras.
Alcaldía y gobernación
José Ramírez, vendedor de verduras dijo que son muchos años que las calles de los alrededores del mercado municipal se encuentran destruidas, “las aguas blancas y negras hacen un lodazal que no permite que la gente venga a comprar a este lugar”.
Según, representantes de la Hidrológica del estado Bolívar y Alcaldía de Caroní, saben de lo intransitables en que se hallan las calles, “también conocen de las tuberías colapsadas y cloacas desbordadas, pero no hacen nada por solucionarlo”.
El problema de insalubridad perjudica a comerciantes que hacen vida en las mencionadas vías de accesos a dicha zona comercial, pero temen denunciar el caos por cualquier tipo de represalia que pueda tomar el ayuntamiento en contra de ellos.
Josefa Muñoz, denunció que tiene muchos años vendiendo hortalizas, sin embargo, ya no vende como años anteriores por los olores putrefactos y las aguas fecales que pasan por su negocio.
Otros expendedores sugieren que la alcaldía de Caroní y gobernación del estado Bolívar, tienen que unirse para eliminar los botes de aguas y asfaltar las calles destruidas de los alrededores del mercado municipal.
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