Un nutrido grupo de docentes se agolparon frente a las instalaciones del Palacio de Gobierno del estado Bolívar, frente a la plaza Bolívar, con pitos, pancartas y consignas «no somos delincuentes, somos docentes» protestaban por un salario justo, al tiempo que algunos demandaban la presencia del gobernador de Bolívar.
La corresponsalía de Ciudad Bolívar, entrevistó a los docentes y durante la protesta no salió ninguna autoridad para atender a los profesionales de educación que protestaban en la calle Constitución del Casco Histórico, parroquia Catedral, quienes realizaron un acta solicitando intervención de las escuelas, la cual firmaron y la recibieron el personal de seguridad.
«Somos la clase trabajadora magisterial del Estado Bolívar, desde el 9 de enero estamos en la calle porque resulta que nuestras tercera convención colectiva única y unitaria llegaron en la parte patronal y no se habían sentado hasta el día de ayer, después de tanta presión a nivel nacional de los maestros en la calle», manifestó Camelia Guerrero.
Nosotros estamos exigiendo que las cláusulas económicas cumplan con el artículo 91 de la sagrada constitución, el cual señala que el salario debe ser justo para cubrir las necesidades de la canasta básica del trabajador y de su grupo familiar, el salario es un patrimonio de la familia venezolana.
«En mi caso, yo trabajo para cubrir mis necesidades familiares, tengo a mis padres, mis hijos y mis nietos en casa, por las mismas condiciones económicas del país, a mí no me da para comprarle las medicinas para la tensión, por eso exijo que dignifiquen mi salario, sin que yo tenga que tener hasta tres trabajos esclavizantes y agotadores, para poder vivir».
Instituciones educativas abandonadas
Asimismo la profesora destacó que la infraestructura de las instituciones educativas en su mayoría está en un estado de abandono, sin obviar que en los colegios donde hay comedores los alimentos no cumplen con los requerimientos mínimos de la tabla nutricional.
Por su parte la profesora Yasulis Rodríguez, declaró: «como miembro del Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (Sitraenseñanza) y docente, todas las semanas salimos a la calle, desde el 9 de enero protestamos en las calles para exigir una respuesta de parte de las autoridades para mejorar nuestra calidad de vida, como profesionales de la educación en este país».
«Hasta ahora no hemos logrado el objetivo principal, que es la dignificación de los salarios, pero sí hemos logrado movilizar a los docentes, además de concienciar a madres, padres y representantes, quienes se han sumado, espontáneamente han salido a la lucha en nuestra defensa y han brindado su apoyo, además no han enviado a sus hijos a las instituciones, y no porque no los vamos a atender, sino porque no hay condiciones; no hay condiciones salariales, no hay condiciones laborales, no están en condiciones las infraestructuras educativas ni hay condiciones para brindar una educación de calidad para nuestros niños», concluyó Rodríguez.
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