Pittsburgh. Estados Unidos. El veterano manejador Clint Hurdle fue despedido este domingo por los Piratas de Pittsburgh antes que el equipo jugase el último partido de la temporada regular contra los Rojos de Cincinnati.
El sorprendente desplome en la segunda mitad de la temporada que dejó al equipo en el sótano de la División Central de la Liga Nacional, unido a una serie de problemas surgidos dentro y fuera del diamante dejaron a Hurdle sin opción de continuidad al frente de la franquicia de Pittsburgh.
El más grave, la detención hace varias semanas del cerrador estelar, el venezolano Felipe Vázquez, de 28 años, acusado formalmente de mantener relaciones sexuales con dos niñas menores de edad.
Pittsburgh entró al partido del domingo 69-92, incluida la marca de 25-47 desde el descanso del Partido de las Estrellas.
Los Piratas nunca avanzaron más allá de la primera ronda y tienen asegurada su tercera campaña perdedora en cuatro años. A Hurdle le quedaban dos años en el contrato.
El gerente general de los Piratas, Neal Huntington, declaró que se trató de una «decisión extremadamente difícil» para la organización.
El entrenador de la banca Tom Prince dirigió el equipo este domingo contra los Rojos.
Hurdle se conviertió en el quinto manejador en dejar el puesto al final de la presente temporada en las Grandes Ligas.
Los veteranos Bruce Bochy, de los Gigantes de San Francisco, y Ned Yost, de los Reales de Kansas City, ya anunciaron su retiro voluntario de la competición.
Mientras que Andy Gren, de los Padres de San Diego, fue despedido el pasado 21 de septiembre y Joe Maddon, de los Cachorros, anunció este domingo, que no seguirá la campaña próxima al frente del equipo de Chicago, donde ha estado cinco temporadas completas y ganó el título de la Serie Mundial en el 2016.
EFE
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