En la calle Miranda, cerca del Mercado Municipal de Upata, se encuentran varias vendedoras de rubros, hortalizas y aliño, madres que un día decidieron salir a las calles a expender cualquier tipo de rubros.
Estas mujeres trabajan a fin de poder ayudar a sus esposos con los compromisos del hogar y de sus hijos, sobre todo, aquellos que están estudiando, destacan qu, ante la falta de empleo y el abuso de muchos comerciantes, prefirieron salir adelante solas.
Para muchos ciudadanos y sobre todo los vendedores informales, bien sea de rubros, artículos de la canasta básica, aliños, hortalizas y frutas, entre otros, el comercio informal es una de las vías que permite generar empleo a familias de escasos recursos económicos, siendo un factor de la pequeña economía doméstica, la cual, alcanza para llevar el sustento diario a los hogares.
Miletsi García, quien lleva cuatro años en la calle Miranda vendiendo aliños y hortalizas en una carretilla manifestó, que ese trabajo le da más que estar en un comercio asiático laborando, “soy madre de dos menores de edad, decidí salir a las calles a vender rubros porque la situación país y la falta de empleo me obligó, trabajo sólo cuatro horas y un día favorable en que vendo casi todo, recojo 300 bolívares, los días con pocas ventas sólo hago 150 Bs”.
Un sustento factible
Para García, el sueldo mínimo que cobran muchos jóvenes, o 20 dólares semanal que cancelan los empleados de un establecimiento, ella lo hace en día “bueno”, cuando vende toda la mercancía que lleva, “he tenido días malos y perdidas en los rubros, por ejemplo, se me ha dañado sacos de papas, pero luego eso lo recupero, mi trabajo en la calle me ha ayudado bastante, porque llevo el sustento y también cubro gastos extras”.
Mientras que Gloria Alvarado, otra de las vendedoras en la calle, expresó que lleva tres años ofreciendo cualquier tipo de hortalizas y verduras a la clientela, “esto me ha ayudado a sustentar mi hogar y cumplir con mi mamá en sus gastos y comida, al igual, que ayudar con la crianza de mis hermanos menores”. Para estas expendedoras y madres de familias, el mejor mes que venden todo a diario es en diciembre, donde según ellas, las ganancias se multiplican, a pesar del inclemente sol, permanecerán en las calles expendiendo sus artículos”.
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!