Los mármoleros que hacen trabajos para las lápidas en el municipio Piar, manifestaron que llevan dos años consecutivos casi paralizados, motivado a la poca contratación para realizar labores en mármol o granito, pues, sus actividades han mermado un 98%.
Luis Bonalde, quien tiene una marmolería en la avenida Humboldt de Upata, informó que en años anteriores regularmente hacían trabajos no sólo en Piar, también en los municipios del Sur, “actualmente hacemos sólo dos o tres trabajos al año, ya no son tomadas en cuenta las labores de marmolería, pues, el poco recurso que tiene la persona, prefiere lógicamente comprar alimentos para su hogar”.
La crisis y la falta de dinero
Para Bonalde, la crisis y la falta de recursos, ha hecho que los dolientes no puedan mandar hacer los acostumbrados trabajos en las lápidas de sus difuntos como en años anteriores, “hay que tomar en cuenta también los altos costos de los materiales como, el mármol, granito, arena lavada, cemento, cabilla, donde cada vez están más costosos”.
El declarante dijo que los materiales son comprados en el municipio Caroní, y el pago de flete está costoso, “un trabajo económico de granito para una tumba y dependiendo el tamaño sale en 900 dólares o 1000 $, mientras que el de mármol pasa los 2.000 mil dólares, en ocasiones es más caro, dependiendo el color”, explicó Bonalde.
Asimismo, este servidor rememoró que en años anteriores para los días de los fieles difuntos se le acumulaban entre 10 a 15 trabajos, y para hacerlo en menos de un mes, desde hace dos años aproximadamente las contrataciones bajaron, “también realizábamos trabajos en Guasipati, Tumeremo y El Callao, “lo único que estamos vendiendo son los libros para las lápidas entre 30, 40 o 50 dólares, incluyendo la escritura o grabado”.
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