Mineros de Guayana

La situación de Mineros de Guayana parecía que iba a mejorar, sin embargo, la retirada de un grupo inversor de Colombia a última hora puso en jaque al considerado Patrimonio Regional, inmerso en una crisis estructural y económica.

A las 6:40 de la tarde de este viernes, la empresa Ovosanti, mediante un comunicado en su cuenta de Twitter, anunció de no continuar con las negociaciones con los actuales propietarios del equipo negriazul.

En el escrito, los compradores argumentaron que «no se pudo llegar a un acuerdo».

Sin inversores ni dolientes surgen más preguntas que respuestas en el entorno de Mineros de Guayana, sobre todo en los jugadores que un grupo entrenó la mañana de este viernes en las instalaciones de Ciudad Mineros, a pesar a la gran incertidumbre que viven por desconocer que pasará con su presente y futuro profesional.

De acuerdo a una persona cercana a la negociación, quien prefirió el anonimato, reveló que «los inversores colombianos hicieron todo, y cuando te hablo de todo es todo, para hacerse con el equipo, pero los actuales directivos no cedieron».

«Ellos querían poner algunas imposiciones, pero los inversores se negaron», dijo la fuente.

Por esta razón, los dirigentes colombianos interesados en salvar a Mineros de Guayana decidieron desistir y cerrar definitivamente la negociación.

El panorama para el equipo guayanés cada vez es peor, sin la inversión necesaria y la nula respuesta de las actual directiva; Mineros de Guayana, además de estar destinado a perder la categoría máxima, podría desaparecer del fútbol venezolano para siempre, como sucedió con Minerven Fútbol Club (1998) y Deportivo Anzoátegui (2019).

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