El juez Luiz Fux, de la Primera Sala de la Corte Suprema de Brasil, se pronunció por la «incompetencia» de ese tribunal para juzgar al expresidente Jair Bolsonaro y pidió la «anulación de todo el proceso» por golpismo contra el líder de la ultraderecha.
Fux, tercero de los cinco jueces de la Primera Sala de la corte que presenta su voto, defendió la tesis de las defensas, que consideran que el caso debía juzgarse en otras instancias, después de que el relator del caso, Alexandre de Moraes, y el magistrado Flávio Dino se pronunciaron por la culpabilidad de Bolsonaro y otros siete reos.
El juez Fux consideró que las acusaciones de conspiración para impedir la toma de posesión del actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva, tras las elecciones de 2022, «bien señaladas por la Fiscalía».
Sin embargo, sostuvo que Bolsonaro y los otros acusados ya carecían de «prerrogativa de foro» el 8 de enero de 2023, una semana después de la investidura de Lula, cuando miles de bolsonaristas asaltaron las sedes de los tres poderes del Estado en un intento de derrocar al nuevo Gobierno.
Según Fux, la Corte Suprema solo puede juzgar a un exmandatario por delitos cometidos durante su mandato, por lo que lo ocurrido el 8 de enero de 2023, cuando Bolsonaro no estaba en el poder, queda al margen de la jurisdicción de ese tribunal.
Incompetencia del Tribunal
Tras esas consideraciones iniciales, dijo que con su voto defiende «la incompetencia absoluta de este tribunal» y que, en virtud de eso, sugiere declarar la «nulidad de todos los actos decisorios practicados».
En ese marco, defendió que el juicio debería ser realizado desde la primera instancia y no comenzar en el más alto tribunal del país.
Según Fux, «al contrario del Poder legislativo o el Ejecutivo, no compete a esta corte hacer un juicio político» y sí pronunciarse con «rigor técnico, minimalismo interpretativo» y con «la Constitución como punto de partida, de camino y punto de llegada».
En contra de la opinión de Fux, los otros jueces y la Fiscalía consideran que la trama golpista comenzó en realidad en junio de 2021, con una dura campaña contra las instituciones dirigida por Bolsonaro desde el poder, y que los sucesos del 8 de enero de 2023 fueron solamente el corolario de la conspiración.
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!
