Ciudad Guayana.- Manuel Díaz, directivo Sindical de Profesionales de CVG Venalum (Sutrapuval) junto a trabajadores de empresas básicas como Sidor y CVG Venalum, convocaron una manifestación en la Plaza Monumental, Alta Vista, Puerto Ordaz para denunciar las graves violaciones de derechos de los trabajadores en la empresa.
“Hoy nosotros estamos denunciando ante la opinión pública y los organismos pertinentes la violación de la libertad sindical y la violación de los artículos 89 y 91 de la Constitución. Nuestro derecho a un salario digno también está siendo violado”, manifestó Díaz.
Exigió al presidente de CVG Industria Venezolana de Aluminio (CVG Venalum), Wolfgang Coto Pérez, la reintegración de los más de 4.000 trabajadores que fueron inactivados desde que comenzó la cuarentena en Venezuela.
“Ya tienen 80 celdas incorporadas y tienen 1.800 trabajadores en planta pero tienen 4.000 por fuera, lo que afecta los beneficios de los trabajadores porque son totalmente diferentes a los que están activados”, aseguró Díaz.
Alegó que tienen “marginados a personas que tienen entre 20 y 30 años” y que tenían dos años y medio desactivados de las plantas, incluso antes de que se estableciera la cuarentena por falta de transporte. “Los trabajadores no quieren dadivas, lo que quieren es trabajar y eso lo sabe Coto”.
Pidió que los 4.000 trabajadores pudieran reincorporarse a su sitio de trabajo, que sus salarios estén igualados a los que se encuentran activados en la empresa y que sus beneficios sean restituidos.
También reclamó “que se cumpla lo que el Estado firmó con la dirigencia sindical que es que el 80% del salario del homólogo activo se le tiene que pagar a los jubilados”.
De acuerdo con las declaraciones presentadas durante la manifestación los jubilados cobran al mes entre 7 y 11 millones de bolívares, lo que equivale a menos de tres dólares mensuales con el precio del dólar paralelo de este 2 de junio, el cual se encuentra en 3.083.000 bolívares.
De igual forma, Manuel Díaz denunció el despido injustificado de más de 400 trabajadores, que de acuerdo con sus declaraciones fue “porque están llamando a actualizar los datos”, aclaró que esta es una forma ilegal y sin causales para despedir a las personas.
“Eso no es causal de despido que un trabajador tenga que ir cada 6 meses a actualizar datos o ¿crees que el trabajador se está cambiando de casa cada 6 meses como hacen ustedes?”, dijo Díaz señalando a Wolfgang Coto.
Afirmó que llevarían el caso a la fiscalía general de la República, los entes gubernamentales pertinentes y frente a Nicolás Maduro para que revisaran los procesos de nóminas irregulares que están presentando las empresas básicas.
También hizo un llamado al resto de las empresas en Ciudad Guayana para que se unieran a la lucha por sus derechos.
Henry Arias, miembro ejecutivo de Alcasa asimismo se pronunció en medio de la manifestación para hacer hincapié en que el fiscal general de la República, Tarek William Saab investigara a profundidad la repartición de las nóminas en las empresas básicas.
“Están sacando a los compañeros de las empresas para ir a limpiar calles, aceras y ese no es el trabajo de nosotros. Hay trabajadores en los CDI y en las Alcaldías, deben hacerlo ellos porque tienen presupuesto para eso ¿Qué está pasando con ese presupuesto?”, sentenció.
Denunció el plan de contingencia que mantiene a las empresas básicas con el mínimo de trabajadores en sus instalaciones al catalogarlo como una forma de sacar trabajadores que no le “rendían pleitesía” a los dirigentes del Federación Bolivariana de Trabajadores (FBT).
Agregó que dicho plan funcionaba para desmantelar las diferentes líneas de CVG Alcasa y CVG Venalum.
“Hemos tenido una batalla contra la intención de demoler y desmantelar la línea 3 y 4, complejo 2 de CVG Venalum y llamamos a todos los trabajadores a no permitir que desmantelen ese complejo”, añadió Arias.
Se dirigieron nuevamente Saab invitándolo a Ciudad Guayana para que él mismo se acercara a las empresas básicas para revisar la decadente situación dentro de las instalaciones, además de deshacerse de cualquier acto “corrupto” que pueda estar ocurriendo.
Ruth Meyerowitz
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