Ciudad Guayana. Trabajadores de la empresa Masisa protagonizaron la mañana de este miércoles 18 de agosto, una protesta pacífica que partió desde la Plaza del Hierro y llegó en frente de la Torre Baliar, sede administrativa de la empresa que fabrica y comercializa tableros de madera para muebles y arquitectura de interiores.
La razón de la protesta radica en “las constantes violaciones a nuestra contratación colectiva, al desmejoramiento cotidiano de nuestros ingresos, a una serie de situaciones por las que hemos pasado y no encontramos respuestas adecuadas…” reza las múltiples exposiciones que han vertido los referidos trabajadores, en el marco de las protestas llevadas a cabo.
La de este miércoles, no fue una más. Fue una protesta que referenció temas que han expuesto incluso a nivel de los tribunales laborales competentes, en la sana intención “de lograr nuestras mejoras y reivindicaciones para todos nosotros, y además estamos pidiendo que nuestros beneficios y deudas sean indexadas. Ya que en caso contrario, estamos perdiendo todo por la hiperinflación así que exigimos sea indexada nuestra deuda y es petición o solicitado en la demanda interpuesta el día 9 de Julio en los tribunales de Puerto Ordaz…”
Durante la marcha, los actuantes vociferaban que la “demanda fue aceptada”, además que cantaron durante el trayecto cumplido, ajustado a derecho, colocados el grupo de trabajadores pegados al sector de la derecha, de la avenida transitada, hasta que llegaron a la parte baja de la referida Torre Baliar.
“Queremos recuperar los espacios que le corresponden a los trabajadores….”, “y no tenemos miedo, no tenemos miedo” capitalizaron las condignas esgrimidas, mientras en lo alto de la Torre Baliar, se observaba como personal de la empresa se asomaba y fotografiaba la intención sana que lo que busca es “mejoras en nuestras reivindicaciones y recuperar la pérdida de los beneficios laborables…”
De igual manera esperan que situaciones de “terrorismo laboral” no se sigan produciendo, y que atiendan a los llamados de las necesidades que poseen los trabajadores y que no sean burlados, como le ocurrió a uno de ellos el que la empresa negoció un mil dólares, en su finiquito, y les dijo que no me sacaron del seguro, a sabiendas de su esposa embarazada, ya con 8 meses, y lo hicieron.
Triste realidad que se asoma por esta transnacional, que deja mucho que desear de una empresa que bien pudiera tener una mejor relación laboral con sus trabajadores, pero que no ocurre así, tristemente.
Ojalá, y todo mejore en el futuro
Rodrigo Malagón Forero
Foto: Romafor
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