Andrea G. Verde
Ciudad Guayana.- El miércoles 28 de mayo del 2019, el Banco Central de Venezuela (BCV) sorprendió a todos y publicó, luego de seis años, el informe oficial de las cifras económicas del país.
Entre la estadística revelada, se evidencia la caída del Producto Interno Bruto en 19,2%, la contracción del sector manufacturero por 22,5% y en el sector comercial por 34,1%, todo en 2018.
«No podemos ofrecer una opinión sobre la calidad de los datos, ya que no hemos tenido la oportunidad de hacer una evaluación completa en ausencia de contactos con las autoridades”, dijo un portavoz del Fondo Monetario Internacional (FMI), negando que la notificación de las cifras fuera a causa de la presión del FMI.
Presiones
El 2 de mayo de 2018, el ente emitió una declaración de censura para Venezuela, porque el país no había entregado la información sobre las cifras económicas oficiales. Por lo tanto, se le dio un plazo de seis meses para entregar toda la data de los índices económicos actualizados.
Sin embargo, fue un año y 26 días después de esta advertencia que el BCV realizó la publicación.
En ese sentido, son varios los economistas que atribuyen la acción a la presión de China, que tiene muchos intereses económicos en Venezuela debido a los préstamos e inversiones.
Mal maquillaje
José Guerra, diputado y profesor de economía en la UCV, a través del portal Finanzas Digital, contrastó las cifras de la Asamblea Nacional, que revelan que la tasa de inflación para 2018 alcanzó más de un millón por ciento y la acumulada 353.544.268% (2013-abril 2019).
Los datos publicados por el BCV sitúan la inflación en 130.060%, lo que quiere decir que la tasa acumulada sería apenas de 1.047% según el ente rector.
“Los datos que acaba de publicar el BCV, por muy maquillados que pudieran estar, reflejan la tragedia económica nacional. Son datos espeluznantes y lo malo es que en la economía todo puede estar peor si no se toman las medidas correctas, en su orden lógico y al ritmo adecuado.” dijo el economista Víctor Álvarez, a través de su cuenta en Twitter.
Álvarez asegura que aunque las cifras del BCV estén «maquilladas», no dejan de reflejar el declive de la economía nacional y, de no tomar «las medidas correctas», podría empeorar.
A su juicio, una de las principales correcciones es «transformar la cultura rentista del venezolano en una cultura tributaria, que entienda que todo no lo puede seguir pagando el petróleo».
En evidencia
En un artículo de opinión el 30 de mayo, el expresidente de CVG afirmó que el Banco Central prefirió callar todo este tiempo porque no podía alterar las cifras y de esa forma quedaba en evidencia el derrumbe por el que atraviesa la economía del país.
Con relación a lo anterior, Ángel Alvarado, diputado a la Asamblea Nacional y economista, publicó en su Twitter que «queda claro que la depresión económica comenzó mucho antes de las sanciones (2014) y atribuible únicamente al modelo socialista».
Venezuela entró en un período de estanflación desde 2013, que se agudizó en 2015 y hoy es costosamente reversible, si se emplea un modelo económico que incluya libertades económicas para reactivar al sector privado.
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