Sao Paulo.-Bragantino brasileño, con gol y asistencia del atacante Artur, derrotó por 2-0 al Libertad paraguayo y dio un paso de gigante para clasificarse a su primera final de la Copa Sudamericana en sus 93 años de historia.
El conjunto de la factoría Red Bull, que nunca antes había llegado tan lejos en el torneo continental, se valió de la calidad de Artur Víctor Guimaraes para poner un pie en la final y dejar contra las cuerdas al cuadro asunceno.
El extremo zurdo de 23 años fue un huracán incontrolable. Regaló el primero a Ytalo, que marcó de cabeza en el minuto 30, y anotó el segundo de penalti en el 50.
Libertad, por su parte, saltó con confianza al césped del Nabi Abi Chedid, que contó con la presencia de un grupo de aficionados por primera vez desde la irrupción del coronavirus, pero se deshizo en muy poco tiempo.
Los goles terminaron por hundirlo.
El partido de vuelta se disputará el próximo día 29 en el estadio Defensores del Chaco, en Asunción.
Al Bragantino le costó madurar el partido. Empezó plano, intercambiando pases horizontales, sin profundidad. A Libertad le gustó el planteamiento inicial de su rival y hasta generó más peligro que los dueños de casa en los primeros compases.
Ferreira fue el más animado del conjunto paraguayo. El 7 lo intentó desde fuera del área y brilló en el desborde. Barboza mostró sus dotes a balón parado y por poco no sorprende a Cleiton a la salida de un córner.
El entrenador del cuadro brasileño, Mauricio Barbieri, se desesperaba en la zona técnica. Pedía diagonales y atacar los espacios.
Artur tomó nota y empezó a aparecer entre líneas. De sus botas salió un disparo desde fuera del área que obligó a Martín Silva a emplearse a fondo y, poco después, el centro del que nacería el primer gol de la noche.
Fue una jugada de pizarra. Saque de esquina en corto, Artur entró en el área y puso un centro picado al segundo palo, donde esperaba Ytalo, que remató de cabeza sin oposición.
El tanto desubicó al club asunceno, que empezó a cometer fallos infantiles muy cerca de su área. De repente, toda la confianza de los minutos iniciales se esfumó.
Libertad empezó la segunda mitad como terminó la primera, con mucha inseguridad.
Un nuevo error a la salida del balón lo aprovechó Artur, cuyo disparo lo interceptó con la mano Vangioni. Penalti claro que el atacante transformó para convertirse en la gran figura del partido.
Pese a todo, un gol metía de lleno a los paraguayos en la eliminatoria. Pero fue el omnipresente Artur el que estuvo más cerca de fusilar de nuevo la red de Martín Silva en un cobro de falta casi sin ángulo.
El arquero uruguayo evitó el tercero de los brasileños después de la enésima jugada entre Arthur e Ytalo. Y como guinda, en el último minuto, el VAR anuló un tanto de Luan Candido porque en el inicio de la jugada la pelota rebotó en el árbitro de campo.
Al final, 2-0 y Bragantino más cerca de una final histórica.
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