En las instalaciones de la Escuela para el Emprendimiento «Monseñor Zabaleta», se llevó a cabo el «Taller de Primeros Auxilios Psicológicos» dirigidos para los docentes que hacen vida en los distintos centros educativos tanto públicos como privados de las parroquias 11 de Abril, Universidad, Vista al Sol y Pozo Verde.

El encuentro fue propicio para dar herramientas y estrategias a los maestros con el fin de capacitarse en dar contención emocional a estudiantes, representantes, incluso colegas, que pueda estar atravesando alguna crisis psicológica.

La Hermana Superior Sara Molina, como representante de la escuela «Monseñor Zabaleta», dio unas palabras de bienvenida a los asistentes y resaltó la importancia de que las instituciones educativas prioricen la actualización profesional de su personal.

«Nuestra congregación, las Hijas de María Auxiliadora o Hermanas Salesianas, como también nos conocen, apostamos no solamente por nuestros destinatarios, sino por la formación de nuestros educadores. Para nosotros, es clave que podamos tener docentes preparados en nuestro país», citó la nota de prensa difundida por la Universidad Católica Andrés Bello Extensión Guayana (Ucab Guayana).

Por su parte, Dorihec Castro, psicóloga clínica y profesora de la Escuela de Psicología de la UCAB, animó a los asistentes a compartir las dificultades de su labor docente.

Entre los que destacaron algunos desafíos sobre el abordaje de niños con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) y con Autismo.

También sobre la apatía y desmotivación de estudiantes y representantes en cuanto a la educación en el país; la falta de personal especializado como psicopedagogos y recursos en las instituciones educativas,

Además, de la falta de compromiso de los padres en cuanto al desarrollo socioemocional de sus hijos, entre otros.

Contención emocional en las aulas de clases

De acuerdo a un estudio liderado por el Centro de Estudios Regionales (CER) de la UCAB Guayana sobre Bienestar Infantil en contextos escolares de Puerto Ordaz, concluyó que el desarrollo infantil se comprende desde una perspectiva contextual y sistémica por las experiencias en el hogar y la escuela, donde padres, maestros y la comunidad desempeñan un papel fundamental en la configuración del bienestar de los niños.

Por ello, es vital que en las instituciones educativas, los docentes y personal administrativo cuenten con conocimientos sobre primeros auxilios psicológicos, de manera que puedan tener un mejor abordaje según las situaciones que se presenten.

La psicóloga Castro definió los primeros auxilios psicológicos como aquellas estrategias para abordar crisis que se puedan presentar en las aulas de clases.

Asimismo, explicó que cuando alguien experimenta una crisis psicológica es como si momentáneamente la persona perdiera su capacidad de reacción y afrontamiento.

De acuerdo con Castro, existen dos tipos de situaciones de crisis: las vitales, son aquellas que se relacionan con el traslado de una etapa a otra; y las circunstanciales son accidentales o inesperadas.

«Puede ser un momento de crisis vital el nacimiento de un hijo, que puede ser desestabilizador para una familia; la jubilación; la adolescencia, que aunque no es un momento puntual, en este largo periodo de tiempo se pueden presentar múltiples crisis psicológicas», detalló.

Crisis circunstanciales

En cuanto a las crisis circunstanciales, Dirige señaló como una situación de especial cuidado cuando los niños, niñas y adolescentes son dejados al cuidado de terceros debido al desplazamiento de los padres, dentro o fuera del país, con el fin de trabajar para mejorar su condición económica, que a su vez puede producir una crisis psicológica la pérdida de un familiar o ser querido.

Entretanto, en el contexto escolar, la aplicación de primeros auxilios psicológicos por parte de los docentes se convierte en una herramienta crucial para abordar situaciones de crisis entre los estudiantes.

Según la especialista, el primer paso es establecer contacto con la persona en crisis, creando un espacio seguro y de confianza. Después, el educador debe dimensionar el problema, respondiendo a preguntas claves como qué tan grave es la situación y cuáles son sus características.

El tercer paso es la búsqueda de soluciones ante el caso del estudiante que se encuentra en crisis. Luego, se toma una decisión como institución educativa. Por último, la psicóloga resalta la importancia de realizar un seguimiento y ofrecer acompañamiento constante, asegurando que el alumno se sienta respaldado en su proceso de recuperación.

Necesidades de los docentes

Los docentes que participaron en el encuentro se sintieron satisfechos ante las herramientas y estrategias adquiridas en el espacio de formación.

Algunos manifestaron lo fundamental que es dominar los primeros auxilios psicológicos, ya que existen factores externos que influyen en la salud mental de los estudiantes.

De igual manera, la trabajadora del Centro de Capacitación Laboral Fe y Alegría en Bella Vista, Mirla Millán consideró que aunque no sean psicólogos, requieren profundizar los conocimientos para aplicar contención emocional.

«Nosotros podemos escuchar sus problemas, hablarles y darles una mano siempre que lo necesiten, ya que sí han venido bastantes personas con problemas al centro», comentó.

Mientras que, Mary Carmen Zerpa, quien presta servicio en el Colegio Privado Jesús de Nazareth de la comunidad Bella Vista, dijo que es importante que se tome en cuenta en la formación curricular del docente temas como las psicologías evolutivas y las neurociencias, con el fin de adquirir herramientas para abordar casos de crisis psicológica de forma asertiva, no solo a los estudiantes sino también a la familia.

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