Con este título vinculado a un tema de actualidad en materia de salud pública, quiero compartir algunas reflexiones. Más allá del hecho real y lamentable, de lo que este virus ha generado a nivel de muertes de las personas, también se ha venido señalando su impacto en la economía en especial de China y en algunas empresas, con proyecciones de impactar otros países. Los reportes son alarmantes:
-La industria automotriz (Hyundai, Honda, Wolsvagen, entre otras) han indicado la suspensión de la producción. Razones: en unos casos porque en China se fábrica algunos de sus componentes (repuestos), en otros casos por las plantas de ensamblaje están en China.
-En la cadena de gastronomía, franquicias reconocidas ubicadas en China, tales como KFC y Pizza Hut han cerrado sus puertas.
-En el área de ropa y modas, varias empresas tuvieron que cerrar tiendas en China, el caso del fabricante de jeans Levi Strauss con más de la mitad de sus tiendas y la compañía sueca H&M con 45 de sus sucursales. También se menciona el caso Nike y Adidas fabricante de artículos deportivos, quienes también han cerrado temporalmente.
Todos estos cierres como parte de las medidas de minimizar la propagación del virus, siendo estos sólo algunos ejemplos del impacto en China, pero al mismo se potencia cuando se trata de producción que va de China a otros países.
Esto muestra, como en ocasiones eventos del entorno (amenazas) pueden impactarnos y la pregunta es, cómo nos preparamos para minimizar o mitigar el impacto de estos eventos en nuestras empresas? Por ello se hace necesario el pensamiento estratégico en la toma de decisiones empresariales y el uso de herramientas como los planes de contingencias y planes de gestión de los riesgos.
Tema por cierto, descrito como buenas prácticas empresariales en las normas ISO de sistemas de gestión como las ISO 9001, 14001, 45001, entre otras, las cuales las contemplan actualmente como requisitos. Vale la pena destacar, que existe la norma ISO 22301 Sistema de Gestión para la Continuidad del Negocio, la cual propone la adopción de buenas prácticas de como responder ante estos tipos de eventos.
El contar con estas medidas, puede ser clave en la supervivencia de la empresa y en su resiliencia o capacidad de sobreponerse a estos hechos. Por ello, los líderes empresariales deben incluir esto en su agenda y considerar escenarios donde pueda prepararse, ejemplo: ataques de ciberseguridad, accidentes ambientales (derrames, incendios, etc.) y de seguridad laboral (accidentes de trabajo y enfermedades ocupacionales), robos, eventos sociales antrópicos (manifestaciones, protestas, etc.), y generar planes a lo interno para prepararse e invertir y/o para actuar en conjunto con organismo del Estado (protección civil, bomberos, hospitales, ministerios, entre otros). También podrían generarse planes globales entre diferentes empresas de un mismo sector o polígono, de forma colaborativa.
Es importante que este evento del Coronavirus, el cual esperamos Dios mediante de solucione pronto, sirva para evaluar y tomar medidas tanto de países, como en el sector empresarial, para de manera responsable generar las condiciones para superar el escenario de riesgo y poder lograr una gestión sostenible y exitosa.
Luis Carlos Cabareda
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