La clasificación reducida de F1, que configurará la parrilla de salida del sprint nocturno de este sábado en el Gran Premio de Qatar, se retrasa veinte minutos, por lo que en lugar de las cuatro de la tarde.
Pirelli, el suministrador único de neumáticos, después de analizar los usados el viernes, comprobó que aquellos que se emplearon durante más de 20 vueltas no reunían todos los parámetros de seguridad pertinentes.
Por ello, decidieron aumentar los límites de pista en dos de las 16 curvas del circuito de Lusail, en las que al parecer los ‘pianos’ que la bordean podrían ser demasiado corrosivos.
De esta manera, la dirección de carrera permitirá que los pilotos salgan previamente a pista durante diez minutos, con el fin de familiarizarse con el nuevo trazado.
Con miras a la carrera larga del domingo, prevista a 57 vueltas, no se descarta, en aras a una mayor seguridad, introducir la obligatoriedad extraordinaria de efectuar al menos tres paradas para cambiar neumáticos.
En una carrera normal el único precepto es el de utilizar al menos dos compuestos diferentes, por lo que hay pruebas que se resuelven con una sola entrada en boxes.
A Verstappen, líder muy destacado del Mundial, le bastarían tres puntos para ser matemáticamente campeón del mundo, por tercer año seguido de la F1, esta misma noche.
Como puntúan los ocho primeros, al astro neerlandés le valdría acabar sexto; y también lo podrían coronar incluso sin sumar: siempre y cuando su compañero, el mexicano Sergio Pérez no concluyese entre los primeros tres la prueba reducida.
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