Gabón celebrará este sábado elecciones presidenciales, legislativas y locales con el presidente Ali Bongo (64 años) como favorito frente a otros 12 candidatos y tras la instauración de un nuevo sistema de votación que le favorece.
Más de 846.800 gaboneses están llamados a las urnas, que permanecerán abiertas este sábado entre las 7.00 hora local (6.00 GMT) y las 18.00 (17.00 GMT).
En estos comicios de una sola vuelta Bongo aspira a un tercer mandato de cinco años (permitido por la Constitución), tras haber ocupado el poder en 2009, después de la muerte de su padre, Omar Bongo, quien gobernó el país desde 1967.
Para contrarrestar su poder, la principal plataforma opositora, Alternancia 2023, apostó a nueve días de la votación por un único candidato de consenso, Albert Ondo Ossa (69 años), profesor de economía en la Universidad Omar Bongo (Libreville), aspirante a la presidencia en 2009 y ex ministro de Educación Superior e Investigación.
De este modo, los seis candidatos presidenciales de la coalición Alternancia 2023 -incluidos tres de los considerados como principales rivales de Bongo- se comprometieron a retirar su candidatura en favor de Ondo Ossa, reduciéndose de dieciocho a doce los aspirantes opositores.
Ondo Ossa reagrupa el mensaje común de cambio, muy presente en los mítines de la oposición durante la campaña electoral, que empezó el pasado día 11 y termina hoy, además de propuestas enfocadas en cuestiones sociales y destinadas especialmente a la juventud.
En estas elecciones destaca la ausencia del candidato que lideró a la oposición en las presidenciales de 2016, Jean Ping, que después de obtener el 48,23 % de los votos frente al 49,80 % de Bongo ha optado por echarse a un lado tras considerar que los comicios están «amañados de antemano».
LA NOVEDAD DE LA PAPELETA ÚNICA
La novedad en estas elecciones, aprobada por Bongo a principios de agosto, es la votación a través de una papeleta única para las elecciones presidenciales y legislativas, que se fusionan por primera vez.
Este sistema refuerza al partido de Bongo porque cuenta con candidatos legislativos en cada circunscripción electoral, y perjudica a los candidatos presidenciales independientes, como Ondo Ossa, que no tienen candidatos legislativos que añadir a su lista.
De este modo, muchos electores se encontrarán con el dilema de renunciar a votar a un diputado si optan por un candidato presidencial que no cuente con lista legislativa.
Este sistema ha sido rechazado por la oposición, que lo considera anticonstitucional, y ha presentado cuatro recursos ante el Tribunal Constitucional que los ha rechazado abogando que este método facilita el derecho de voto a los votantes sin “perderse entre la multitud de papeletas que se les habrían entregado a la vez”.
LA SOMBRA DE LA VIOLENCIA ELECTORAL DE 2016
Esta votación tendrá lugar bajo la sombra de las presidenciales de 2016, cuando Bongo ganó a Ping por menos de 6.000 votos y la oposición denunció fraude electoral, lo que desató una crisis postelectoral con protestas violentas, fuertemente reprimidas, en las que los manifestantes llegaron a incendiar la Asamblea Nacional.
Aquellas elecciones también fueron cuestionadas a nivel internacional y la misión de observación de la Unión Europea, que este año no enviará observadores a Gabón, indicó que se produjeron “anomalías” que ponían en duda el proceso y su resultado final.
Con estos antecedentes, las Naciones Unidas han solicitado a las partes que garanticen un proceso electoral “pacífico, inclusivo y creíble”.
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