El esperadísimo regreso del Joker, esta vez de la mano de Todd Phillips y Joaquin Phoenix, se ha convertido en una de las mayores decepciones de taquilla del año. Joker: Folie à Deux, una producción que costó casi el triple de su predecesora, no ha logrado cautivar al público ni recuperar la inversión.
A pesar de contar con un elenco estelar y un director reconocido, la película ha sido criticada por su excesivo presupuesto, su repetitiva trama y su falta de innovación.
A diferencia de la primera entrega, que sorprendió al público con su oscura visión de Gotham City, Joker: Folie à Deux se siente como una mera repetición de los eventos anteriores. La película se centra en diálogos interminables sobre los hechos ocurridos en la primera parte, en lugar de avanzar la historia o presentar nuevos elementos, según reseña la BBC.
El elevado costo de producción de la película es otro de los puntos más cuestionados. Con un presupuesto estimado en más de 200 millones de dólares, Joker: Folie à Deux se encuentra entre las películas más caras de la historia. Sin embargo, su resultado en taquilla ha sido muy inferior al esperado, lo que ha generado pérdidas millonarias para el estudio.
Folie à Deux recaudó US$37,8 millones en su primer fin de semana en Estados Unidos, menos de la mitad de lo que facturó la primera película durante el mismo período en su estreno.
Según el director editorial de Deadline, un medio especializado en la cobertura de Hollywood, «es una de las secuelas más bajas que se recuerdan de una importante película de franquicia basada en un cómic», escribió.
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