Ciudad Guayana.- Sacarle provecho al ingenio que todos tenemos, acompañado de perseverancia y disciplina se puede desarrollar una actividad, que permita un sustento económico, sin dejar de hacer lo que más nos gusta.
Así lo ha dejado ver Joselin Amparan, licenciada en gerencia de Recursos Humanos, quien ha logrado materializar su sueño de iniciar su propio negocio, combinando los conocimientos adquiridos en su carrera con su pasión por la orfebrería.
Utilizando sus manos e ingenio plasmado en cada pieza que realiza la hace una mujer emprendedora.
Esta joven guayacitana se ha dado a conocer en la ciudad por su marca de bisutería Lin2accesorios.
En dos años ha logrado mucha popularidad sin tener tienda física, solo utilizando la red social Instagram y participando en bazares.
Estos han sido los medios utilizados por Joselin para exhibir sus prendas.
Tanto así que ha participado como invitada en secciones de emprendimiento de programas televisivos como Vitrina transmitido por Televen y ¿Qué hay de nuevo? del Canal I.
Sin dejar de lado que sus productos también son solicitados en otros países.
«A través de mi marca he podido conocer gente grandiosa, concretamente desde las redes sociales he podido llegar a cada rincón de Venezuela, inclusive pasar fronteras».
@Lin2accesorios es su cuenta en Instagram.
Y es que actualmente los pequeños empresarios están utilizando esta plataforma, como el medio más eficiente para crear su cartera de clientes.
Una marca para inspirar
Técnicas de alambrismo, tejido peruano y orfebrería es lo que emplea esta emprendedora para dar forma a sus joyas.
Esta joven mujer quiere demostrar, que sin irse del país se puede concretar con perseverancia y pasión, un negocio fructífero partiendo de las artes manuales.
«Dentro de mis objetivos es que mi marca sirva para inspirar desde jóvenes hasta adultos mayores», acota Joselin.
Es por ello, que Lin2accesorios cada cierto lapso brinda una oportunidad de capacitación para quienes les interese aprender este oficio.
No desmotivarse ante pérdidas
«Arropar el miedo ante posibles pérdidas económicas, son experiencias que deben verse de manera positiva. Hay que creer en uno mismo, porque uno no es lo que dice sino lo que hace».
Es lo que recomienda Joselin a todas las mujeres que no se atreven a iniciar un emprendimiento por temor a fracasar.
Asimismo sugiere capacitarse constantemente para ofrecer un producto innovador.
Una de las cosas más gratificantes, que ha conseguido desde el inició de su emprendimiento es el reconocimiento y apreciación de su trabajo por parte del público.
También confiesa que todas las marcas que algún momento pasan por alguna dificultad, «eso lo he vivido, en el caso de pérdidas de dinero, mercancía que no llega o se pierde».
Sin embargo eso no ha sido motivo para decaer, sino que son experiencias de las que aprendes y no queda más que «continuar porque es parte del proceso».
«La gente se da una idea que necesita mucho dinero para iniciar algo. Lo importante es ofrecer algo diferente o darle tú toque personal utilizando los recursos que se tiene, yo comencé con lo que tenía», afirma.
Joselin enfatiza que toda persona tiene talento e invita a todas las personas a buscar aquello en lo que se sientan a gusto.
Y, visualizar que su emprendimiento tendrá frutos positivos a pesar de la situación del país.
Es que sin dudas una persona visionaría se motiva desde sus habilidades, tenacidad, ímpetu y organiza las herramientas que tiene a la mano, todo ello, está concatenado hacia una oportunidad de negocio rentable.
¿Cómo iniciaste tú emprendimiento?
Luego de año y medio yo logré comprar mis pinzas profesionales.
Es decir, trabajaba con lo que tenía, me las ingeniaba pero me salían. Por ejemplo, si necesitas hacer un círculo y no tienes un mandril optas por un marcador.
Igualmente mi mini estudio fotográfico lo elaboré con una caja y luces led, y allí es cuando la gente me dice “oye, tú si eres creativa”.
¿Cuándo comenzaste?
Lin2accesorios comenzó el primero de diciembre de 2.016. Cuando arranqué este proyecto estaba finalizando mi tesis de grado y, fue muy tedioso es que no fue nada fácil, pero gracias a Dios pude hacerlo.
¿De dónde surge ese interés por la bisutería?
Desde que era adolescente veía a mi mamá vender accesorios hechos por ella misma, pero para ella fue algo más pasajero. Recuerdo que yo le quitaba las prendas para colocármelas (risas).
En cambio a mí me apasiona esta labor, para mi mamá era como un pasatiempo. Desde un principio tuve la inquietud de vender algo por Instagram.
¿Sabías de tu talento?
No, yo no conocía ese “don” en mí, yo tuve que desarrollarlo. Estuve en la búsqueda de encontrar lo que realmente me gustara, y toda persona debe hacer lo mismo, iniciar esa búsqueda.
Hice muchísimos curso desde panadería, pastelería, pasapalos, corte y costura, sin embargo nada de eso me llenaba.
¿Qué les aconsejas a las personas para que encuentre su vocación?
Considero que cada persona tiene un “don”, y cada quien tiene que ir por la vida buscando en que te sientes más cómoda, por ejemplo yo me decía: tengo que encontrar algo que me guste, soy muy coqueta y obviamente este mundo de la mujer de utilizar accesorios me encanta.
¿Mucha gente no creyó en ti?
Hay una anécdota muy particular mientras hacia el curso de alambrismo, es que hay compañeras que hoy se ríen de mí (risas).
Porque yo era la que faltaba a clases como tampoco tenía las pinzas o herramientas necesarias, le decía a la profesora que no podía hacer ciertas piezas por eso.
Hasta que nos dijeron que teníamos una Expo, y recuerdo que me ayudé muchísimo con revistas que tenía mi mamá, y con las plataformas digitales.
Lo cierto, es que practique muchísimo, que cuando fui a la exposición tenía piezas elaboradas que nunca lo habían enseñado en el curso, es decir, sobrepasé el nivel del curso.
¿Trabajo o pasatiempo?
Yo nunca lo vi como un hobbie, mi limitante hasta hace poco era que no tenía las herramientas. Siempre dije: tenga la profesión, que tenga yo voy a tener mi marca.
¿Cuándo inicias tu preparación?
Retomé en el año 2.016 con el curso de alambrismo y fue cuando me di cuenta que era lo que me gustaba, continúe el siguiente año con punto peruano y en 2.018 orfebrería.
¿Cuál fue primera colección?
Yo me prepare para Diciembre, en la tienda virtual ofrecí la colección Arcoiris. Tenía una gran cantidad de collares, pulseras, anillos, todo en set y muchos accesorios para niñas.
Hasta ahora tengo tres colecciones, la segunda fue Geometría y luego realicé Las Faraonas, pensadas para eventos como pasarelas.
Para los bazares tengo una colección llamada Rincón Venezolano.
¿Cómo describe tu marca Lin2accesorio?
La marca se caracteriza por tomar en cuenta las opiniones de las clientas y, combinarlas con nuestra experiencia. Que ellas se sientan satisfechas por el hecho de escuchar su opinión.
Sobre la base de las opiniones de la clientela, puedo tener el índice de lo que más gusta, lo que se vende, y aporto modificaciones.
¿Qué pieza agrada más?
Los zarcillos solitario agrada muchísimo y borlas también se venden muchísimo.
¿En qué te inspiras además de tomar en cuenta el pedido de las mujeres?
Yo soy muy coqueta y, tengo la idea que si a mí me gusta a las demás mujeres también (risas).
Próximos proyectos
Joselin tiene pensado publicar tutoriales y viajar a Colombia para capacitarse en otras técnicas.
Además de continuar participando en bazares, dictar cursos de alambrismo y punto peruano.
Por Yessika Muñoz
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!