Moscú.- El ministro de Asuntos Exteriores de Bielorrusia, Valdímir Makéi, afirmó este miércoles en Moscú que su país, sumido en protestas antigubernamentales desde hace más de tres semanas, ha logrado evitar una revolución a la ucraniana, orquestada desde el exterior.
«Hemos resistido al primer embate y hemos evitado la implementación en Bielorrusia del guión ucraniano, una revolución de color organizada desde el exterior», dijo Makéi al inicio de una reunión con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov.
El jefe de la diplomacia bielorrusa agregó asimismo que es la postura «moderada» de Rusia la que actúa de «contrapeso» y permite a su país «frenar» la injerencia extranjera, y anunció que la situación en Bielorrusia ya se está estabilizando.
Lavrov, a su vez, adelantó que el primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, realizará mañana una visita de trabajo a Bielorrusia.
Un día después, llegará a Moscú el ministro de Defensa de Bielorrusia, Víctor Jrenin, según la cartera de Defensa bielorrusa.
Moscú recordó hoy además que durante las próximas semanas tendrá lugar un encuentro entre los presidentes de Rusia y Bielorrusia, Vladímir Putin y Alexandr Lukashenko, respectivamente, lo que corrobora la intención de las partes de continuar el desarrollo de unas relaciones basadas en «igualdad y beneficio mutuo».
La intensificación de las conversaciones ruso-bielorrusas se produce en medio de una grave crisis política en la antigua república soviética, escenario de multitudinarias protestas desde las elecciones presidenciales del 9 de agosto, calificadas de fraudulentas por la oposición.
EFE
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