El clima de anarquía que se vive en la población de El Callao se refleja en cualquier lugar, siendo el tema vial uno de los más «vistosos», donde un gran número de motorizados destacan por el constante incumplimiento de las señalizaciones, además del manejo temerario en las estrechas calles de la localidad.
«La gente hace lo que le da la gana, aquí es la ley del más fuerte»; destacó Fernando Gutiérrez, quien recordó que muchos de los motorizados andan a alta velocidad y manejan en contravía sin ningún tipo de control.
Otras de las situaciones que se presenta es la falta de elementos que identifiquen a los motorizados, lo cual facilita que en varios casos algunos maleantes se aprovechen de la situación.
«No son todos, pero hay motorizados que aprovechan la facilidad que da una moto para realizar actos delictivos», resaltó Luis Gil quien a su vez pidió más control por parte de los cuerpos de seguridad en torno al delicado tema.
Así mismo, Gil mencionó que muchas motos no cuentan con luz y en algunos casos las que cuentan con la iluminación operativa, tienden a exceder al punto de enceguecer a los demás conductores.
Cabe destacar que también muchas motos son estacionadas de forma que impiden el normal tráfico de vehículos y el de peatones, lo que casi siempre desemboca en conflictos entre las personas quienes se sienten afectadas por la situación.
A pesar de los distintos puntos de control en El Callao, el tema de los motorizados sigue siendo un verdadero “dolor de cabeza” para autoridades y usuarios de la población minera.
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