La demanda de gasolina a nivel nacional escaló a tal grado que el gobierno está ideando un plan para empezar a importar gasolina, pues en los últimos días los entes oficiales se han fijado en las extensas colas presentes en Caracas.
Según informes realizados por corporaciones de la industria petrolera, la demanda de gasolina exigida en Caracas se ha elevado de 19.000 barriles al día a 30.000 barriles por día, representando así un incremento del 57.9% para este 2023.
A nivel nacional se estima que suba de 85.000 barriles diarios a 110.00 barriles en lo que resta del 2023. Tales cifras fueron consideradas por el ente gubernamental, cuya única opción es comprar gasolina en el extranjero.
Para finales de este año, la demanda de combustible se dispararía en un 29.4%.
Usarán a su favor la reducción de las sanciones por parte de EEUU, y llegarán a acuerdos con compañías internacionales ya presentes en el país para comenzar con las importaciones.
La estrategia de PDVSA es prevenir cualquier inconveniente que pueda generarse en la temporada de navidades y asegurar el suministro continuo de la gasolina.
El factor determinante de la falta de combustible en el país es el plan de distribución, debido a la escasez de las cisternas que puedan trasladar en los Estados.
Ante dicha situación, se anexaron al grupo de cisternas más de 100 unidades, comprando unos 450 camiones. Para finales de este año contarán con 800 cisternas operativas, que dependiendo de los ingresos generados, aumentará a 1.700 para 2024.
A pesar de las dificultades que se han presentado para PDVSA, con la implementación mínima de la materia prima y las inversiones, siguen buscando una solución para ofrecer a los venezolanos combustible diario.
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