Unas mil personas se manifestaron este sábado por el centro de Madrid por la autodeterminación del pueblo saharaui, y acusaron al Gobierno español de «traición» por «entregar» a los saharauis «a la dictadura marroquí».
En la manifestación, encabezada por los portavoces de partidos de izquierda como Podemos y Sumar (socio de la coalición de Gobierno), se vieron pancartas acusatorias hacia Marruecos y gritos a favor del derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui, así como una pancarta de solidaridad con las víctimas de la dana en Valencia (este), temporal que ha causado más de 200 muertos en el litoral mediterráneo español.
Isa Serra, portavoz de Podemos, dijo que «el pueblo saharaui es un ejemplo de lucha y resistencia durante muchísimo tiempo» y que «defendemos su autodeterminación», y recordó al Gobierno español que «España tiene una responsabilidad histórica con el Sáhara Occidental, como establecen las resoluciones de Naciones Unidas».
«Es una vergüenza, una traición por parte del Gobierno de (Pedro) Sánchez al pueblo saharaui, ese giro que vulnera el derecho internacional entregando al pueblo saharaui a la dictadura marroquí», acusó.
Propuesta de Marruecos
En marzo de 2022 Sánchez se sumó por carta a la propuesta de Marruecos de zanjar el problema de Sáhara mediante el establecimiento de un régimen de autonomía para este territorio.
Enrique Santiago, miembro de Sumar y portavoz de Izquierda Unida, se sumó a la petición de Serra y pidió que se celebre un referéndum de autodeterminación. «Esperamos que el Gobierno cambie y se ponga al frente de la comunidad internacional para garantizar la libre determinación pueblo saharaui», añadió.
El representante del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, dijo a EFE que la manifestación «que se celebra todos los años, denuncia los acuerdos de Madrid mediante los cuales España abandonó sus responsabilidades con el Sáhara marroquí», y denunció que «el presidente del Gobierno ha roto con las responsabilidades de España como antigua potencia administradora del Sáhara».
«Su postura no concuerda con el derecho internacional y rompe con el consenso que ha existido siempre en política exterior española respecto a este asunto», añadió, y pidió que España «asuma sus responsabilidades para culminar este proceso descolonizador, del cual sigue siendo responsable».
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