Ciudad Guayana. El Padre Luis Ovando Hernández, Rector del Colegio Loyola Gumilla, salió al paso de la nota informativa que este domingo publicó este diario, en razón de la actualidad por la que atraviesa la cancha “A” del referido plantel educativo de Ciudad Guayana.
Ovando Hernández, presbitero jesuita que tiene unos 4 años al frente de la rectoría del referido plantel, encabezó un comunicado en el que detallaba algunos aspectos que en virtud de la nota publicada se han dado a conocer, en razón inicial de la preocupación que algunos ex alumnos y padres y representantes del Colegio Loyola, habían dado a conocer a través de la redes sociales en razón meramente de llamar la atención sobre el particular.
De entrada, el rector loyolista confundió el término “pérdida del estatus ‘A’ de nuestro campo principal de fútbol, como consecuencia de la pandemia…”
Realmente la nota en cuestión, que ha abierto el amplio debate público de los dolientes del Colegio Loyola, mencionaba que había “la preocupación por la pérdida de estatus, del campo “A” del Colegio Loyola.
Quedó claro una cosa es “pérdida del estatus ‘A’ de nuestro campo principal de fútbol…” a la preocupación por la pérdida del estatus, del campo ‘A’ del Colegio Loyola…”
En medio del comunicado expuesto, el rector del Loyola estableció “que no podemos menos que agradecer al periodista Malagón el sincero interés demostrado por el lamentable estado en que se halla específicamente esta instalación del Colegio, pero debemos asimismo aprovechar la ocasión que nos brinda él y algunos de su Promoción 1985, quienes han estado bien activos sobre las condiciones actuales del Campo de fútbol, para precisar un par de cuestiones a este propósito…”
Seguidamente en tres amplias ponencias, puso de manifiesto la actualidad que atraviesa el Colegio Loyola, y la manera cómo desde un tiempo para acá, enfrentar la puesta en escenas de mejoras, mantenimiento, y cualquier actividad que vaya en pro de la mejora del citado plantel educativo.
“Primero el Colegio Loyola Gumilla NO AUTORIZA NI RESPALDA NINGÚN TIPO DE RECOLECCIÓN DE FONDOS para hacerle mantenimiento al Campo de fútbol principal. Con corazón agradecido, acogemos el interés demostrado y estamos dispuestos a respaldar otras iniciativas como podrían ser —asegurando las necesarias medidas de bioseguridad—, jornadas de limpieza y mantenimiento donde participemos personal obrero del Colegio, FUNDAEDUCA, padres y representantes, y todos ustedes, dolientes honestos de la cancha de fútbol; lo hemos hecho en el pasado reciente con el desmalezamiento y poda de árboles, y los resultados han redundado en nuestros espíritus Loyola…”
Como segundo aspecto, Ovando estableció que “por muy antipático que pueda sonar LOS CAMPOS DEPORTIVOS DEL COLEGIO LOYOLA GUMILLA, NO SON HOY DÍA LA PRIORIDAD: nuestro corazón está expectante por el regreso a clases presenciales, y hemos invertido en los parques de recreación y primaria, y padres y representantes han colaborado sostenidamente con ello; hemos acondicionado los salones de clases a la espera de nuestros alumnos; hemos remodelado y reparado finalmente los baños para damas de bachillerato y estamos proyectando hacer lo mismo con los de los caballeros. Las canchas deportivas pueden esperar….”
En este punto, y consultando al propio rector, en medio de una cita que atendió a este redactor el mediodía de este lunes, y que había sido concertada con el referido durante la pasada semana, en la búsqueda de la información veraz y objetiva.
Refiere Ovando Hernández mas adelante como tercer punto en su comunicado, que “la cancha principal del Colegio, requiere sólo en gasolina, ciento veinte (120) litros para hacer funcionar los “bastones”, e igual cantidad para hacer funcionar el carrito-podadora profesional. Después es menester dar con pesticidas eficaces, de calidad, para combatir los hormigueros. Es igualmente necesario nutrir el terreno con fertilizantes. El sistema de riegos funciona decentemente. Por último, ES “CONDITIO SINE QUA NON” (“condición sin ecuanom” (en latin), COMPRENDER QUE TODA INICIATIVA DEBE CONTAR CON EL RESPALDO DE FUNDAEDUCA, RESPONSABLE DE LOS CAMPOS DEPORTIVOS, Y CON LA APROBACIÓN DEL RECTORADO…”
Recordó el titular loyolista que este “mantenimiento artesanal” al campo de fútbol, dura quince (15) días. Pues bien: sin tomar en cuenta personal responsable, productos y maquinaria que el campo exige, en nuestra actual situación país el gasto mensual en combustible para mantener la cancha limpia, serviría para pagar un (1) alumno durante dos (2) años y seis (6) meses…”
Comparando estos valores, significó que “no nos parece apropiado hacer semejante gasto cuando, por otro lado, LOS CAMPOS DEPORTIVOS NO ESTÁN UTILIZÁNDOSE, POR RAZONES OBVIAS Y DE FUERZA MAYOR…” aunque reconoció ampliamente que “es una decisión tomada por el Consejo Directivo, el cual asume las consecuencias que se deriven de semejante decisión, con responsabilidad de hombres y mujeres de buena voluntad, de educadores de vocación y de sacerdotes jesuitas encargados de un Colegio que amamos tanto como aquellos que hacen vida acá…”
Finalmente, el rector del Colegio Loyola, significó que “hay que recordar con respeto y caridad evangélica que, como su nombre lo indica, somos un COLEGIO. Todas nuestras instalaciones están para servir de manera privilegiada al completo desarrollo del proceso educativo de nuestros alumnos, y ofrecer también nuestras estructuras en beneficio de la colectividad, tanto cuanto esto favorezca el fin por el que nos hallamos aquí. Pero no al revés. El Loyola Gumilla es un Colegio con un campo de fútbol (también); pero no un campo de fútbol con Colegio…”
Envió un mensaje a la “Promoción 1985” (promoción de egresados del Colegio Loyola) y todos quienes deseen participar que “los estaremos invitando en los próximos días para una JORNADA DE CARIÑO AL COLEGIO LOYOLA, en su cancha de fútbol. Respetaremos en extremo las medidas de bioseguridad, mientras que nuestros corazones eclosionan de alegría por el reencuentro alrededor de una causa justa…”
Cerró citando unas palabras que en medio de la nota sobre la cancha del Colegio Loyo,a, vienen a la mente.
“Terminemos recordando otras palabras de nuestro hermoso himno, a ejemplo de nuestro antiguo alumno Rodrigo Malagón: “En nuestros pechos se arraiga el más noble y patrio amor”. Qué lo que está por venir nazca de nuestros corazones, hogar de este tipo de amor noble, que quiere y le duele Venezuela…”dijo el Pedro Ovando Hernández, a nombre del Consejo Directivo del Colegio Loyola Gumilla, en su condición de rector.
Queda para la exposición pública sobre este caso, el poder haber conocido la realidad de la citada cancha, por cierto en este estado, gracias a las hormigas, que ante la falta de uso del mismo, se han permitido ganar inmensos espacios en el citado espacio deportivo.
También, destacar como lo refirió Ovando Hernández este mediodía que los salones del Colegio Loyola, habló de 45 aulas, están listas para recibir a los alumnos, cuando así toque conveniente, para retomar las clases presenciales, dando fe con esto, de la inversión que se hace para el bien y desarrollo del plantel educativo.
Igual referencia mas ampliada, como lo expresa someramente el comunicado, la nueva realidad en las inversión de una serie de baños que se ha venido haciendo, y que cuenta con esa especial inversión que en su infraestructura educativa, nos tiene acostumbrado el Colegio Loyola mas allá de las cinco décadas y medias que han transcurrido.
Por lo pronto hacer votos, para que en términos generales, todo vuelva a ser normal, que regresen los alumnos, y la alegría de los pasillos y aulas del Colegio Loyola, para cantar a pulmón abierto, el “Loyola soy”.
Amén. Que así sea…
Rodrigo Malagón Forero
¡Síguenos en nuestras redes sociales y descargar la app!