México, México. La agrupación chilena afincada en México Los Ángeles Negros son la prueba de que existe cierta música que nunca muere, ya que, después de 51 años de carrera, siguen logrando encandilar a los más jóvenes, explicaron este viernes en Ciudad de México.
«Seguimos sintiendo asombro. La realidad va más allá de cualquier fantasía», declaró a Efe Mario Gutiérrez, uno de los fundadores de la banda y el único de los actuales que está desde los inicios.
Para él, haber tenido la oportunidad de conocer el mundo le ha hecho saber que sentimientos como el amor, el tema principal de toda su discografía, es un sentimiento universal.
«Cuando uno tiene oportunidad de viajar, mira el cielo desde el dormitorio y no sabe ni en que país está. He aprendido que en el mundo y sobre todo en Latinoamérica hay un sentimiento uniforme. Los latinos somos sentimentales enamorados y esta música es el anillo al dedo», explicó.
Durante un espectáculo íntimo interpretaron algunos de sus más célebres temas como «Como quisiera», «Cuando tú te vayas» o «Y volveré», que desde 1968 captaron al público Latinoamericano con sus letras crudas y románticas.
A día de hoy, según Gutiérrez, guitarrista de la agrupación, tienen «más madurez» y pueden ver «las lágrimas y sonrisas de las parejas». «Antes estábamos mirando a las chicas», bromeó.
Aunque han cambiado muchas cosas, su música mantiene la esencia y pisar el escenario sigue causándoles nervios y emoción.
«Después de 51 años es relativo estar nervioso. Todavía da un poquito de miedo… aunque la seguridad de tantos años de experiencia y el cariño del público nos ayudan», comentó uno de los miembros, Luis Astudillo «Luchito».
«Sentimos un poco de miedo pero estamos seguros de que cuando uno se entrega de corazón, va a recibir algo bueno», añadió Antonio Saavedra, uno de los cantantes.
Una de las particularidades de esta banda es que siempre se han mantenido en el mismo género que nació en los alos 70, canciones románticas con sonidos latinoamericanos combinados con funk y jazz, y sin embargo han conseguido no quedar en el olvido.
«No es fácil lograr una sonoridad. En los 70 era más sencillo escuchar dos compases y saber quién era el intérprete. Ahora la gran mayoría sigue la corriente predominante», mencionó Gutiérrez.
Además, han tenido la fortuna de que muchas personas que conocieron a los Ángeles Negros cuando eran muy pequeños porque los escuchaban en su casa, han reconectado con ellos años después al reencontrarse «con letras que identifican lo que ellos sienten».
La formación siempre ha evitado hablar de polémicas a pesar del revuelo que generaron cada vez que se iban antiguos integrantes y llegaban algunos nuevos y, aseguraron, no reconocen los documentos audiovisuales o los libros que se hayan hecho basándose en ese tipo de cosas.
Sin embargo, hay un tema que no pueden dejar pasar: los plagios. Y es que a lo largo de su carrera han visto como personas y grupos se hacían pasar por ellos con nombres similares e incluso impedían que pudiesen tocar en algunos países.
Gutiérrez explicó que en Colombia una persona registró el nombre de la banda, en Argentina hay un grupo que se hace pasar por ellos e incluso en Estados Unidos una persona con la que compartieron tiempo lleva cuarenta años «viviendo y sobreviviendo» de lo que ellos hacen.
«Es difícil, duele. Por un lado es lindo que te copien porque la gente copia lo que le gusta y lo que funciona. Pero es triste cuando se lucran contigo. (…) Hemos hecho mucha inversión de dinero y sentido mucho coraje. Pero hemos actuado y parece que ahora está caminando más en serio», sentenció el guitarrista.
Actualmente se encuentran dando conciertos dentro de la gira del disco de celebración de sus 50 años de carrera, «Antes de que ustedes nos olviden», y aseguraron que todavía les queda mucho que ofrecer de sus temas más clásicos e incluso, nuevas canciones por interpretar.
EFE
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