Padres y representantes, profesores y líderes de la Unidad de Batalla Hugo Chávez (UBCh) del Roble Sur, San Félix, expresaron su profunda preocupación por el ambiente «lúgubre» en el que se encuentra la Unidad Educativa Jose Ángel Ruiz.
Félix Yepez, jefe de UBCh, destacó a Nueva Prensa Digital la necesidad urgente de abordar los problemas que amenazan el bienestar de los niños que iniciaron el período escolar 2023-2024.
«Uno de los problemas más evidentes es el desmalezamiento del área, el cual ha sido constantemente postergado debido a la falta de recursos por parte del Estado», detalló.
A pesar de esto, Yepez señaló que los servicios generales de la Alcaldía de Caroní, la Gobernación del estado Bolívar e incluso las Brigadas Comunitarias Militares para la Educación y la Salud (Bricromiles) podrían resolver este problema en tan solo diez minutos si así lo desearan.
El jefe de UBCh manifestó que la falta de fumigación en José Ángel Ruiz, es otra de las cosas que representa un riesgo en la salud de los niños, ya que los mosquitos pueden transmitir enfermedades.
Baja afluencia de alumnos
Los afectados destacaron la necesidad de que se realice el desmalezamiento y la fumigación, así como la intervención de los baños, los cuales se encuentran en condiciones infrahumanas.
Del mismo modo, el jefe de UBCh mencionó que la cocina y el techo presentan problemas graves que requieren atención inmediata.
En cuanto a las cifras de matrícula, en preescolar hay 117 alumnos, mientras que en primaria se cuentan 459, para un total de 576 estudiantes.
«Es preocupante que el número de alumnos haya disminuido en comparación con el año pasado, esto solo indica que los padres han optado por sacar a sus hijos de la institución debido a las condiciones precarias», dijo.
Asimismo, resaltó que es fundamental evitar que los alumnos abandonen las instituciones educativas por las condiciones en las que se encuentran.
Presencia de filtraciones en José Ángel Ruiz
Yepez mencionó que otro problema grave, es la presencia de filtraciones en todo el techo de la institución, lo cual impide dar clases cuando llueve.
«Los salones se encuentran en un estado total de deterioro, y las partículas y la humedad afectan la salud de los estudiantes y maestros, especialmente en aquellos que sufren de asma», instó.
En vista de esta situación, los afectados hicieron un llamado a las autoridades competentes para que se tomen medidas urgentes.
«En la institución se requiere pintura, impermeabilización, desmalezamiento, fumigación e iluminación adecuada. Nosotros estamos esperando para que nos atienda el Bricomiles, a mí me notificaron que esta escuela quedó para la segunda fase», precisó.
La comunidad del Roble Sur también expresa su preocupación y se suman al llamado para garantizar la seguridad y el bienestar de los niños de la institución.
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