La Coruña, España. El Deportivo recuperó al delantero venezolano Miku Fedor para medirse este domingo (17:00 horas) al Celta de Vigo en el último partido de Segunda B para los dos equipos gallegos en 2020, una cita «dolorosa» para los coruñeses, tal y como admitió su entrenador, Fernando Vázquez, por enfrentarse al filial de su eterno rival.
En La Coruña, evitan el término derbi para el partido con el segundo equipo del Celta, una cita que refleja que el Deportivo tocó fondo con su descenso a Segunda B y que supone una deshonra para él.
La buena noticia para el conjunto coruñés es que volverá a estar arropado por sus aficionados en el Estadio Abanca-Riazor, que contará con un aforo limitado de mil espectadores.
También en el lado positivo figura la recuperación de Miku, que ha superado a tiempo una lesión muscular.
Las únicas bajas del equipo coruñés por lesión son el centrocampista Keko Gontán y el central Derik Osede, que se reponen de sus respectivas dolencias y podrían estar disponibles la próxima semana en la Copa del Rey ante El Ejido 2012.
A ellos se suma el centrocampista ofensivo José Alonso Lara, sancionado con dos partidos por su expulsión en la anterior jornada ante el Pontevedra.
El Deportivo pretende acabar 2020 como equipo invicto en Segunda B y líder en solitario del Subgrupo A del Grupo I.
Enfrente, tendrá a un joven conjunto motivado por enfrentarse al máximo rival de su equipo principal y jugar, además, en el Estadio de Riazor.
EFE noticias
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